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Naucalpan, Méx.— Casi 100 tiraderos clandestinos operan en zonas boscosas y ejidales de este municipio, de los cuales, una veintena fue documentada por autoridades de la Secretaría de Medio Ambiente local.
En esos sitios, el cascajo y la basura rellenan barrancas verdes, tapan árboles y ríos, denunciaron los síndicos y regidores que integran la Comisión Edilicia de Preservación y Restauración de Medio Ambiente.
En un recorrido realizado por EL UNIVERSAL en Tepatlaxco y Rincón Verde, vecinos —encabezados por el delegado vecinal Rigoberto Ortiz Lozada— externaron su preocupación por la situación ecológica en los barrancos en las localidades de Puente de Piedra y Aguilillas.
“Es un ecocidio que ocurre todos los días con la llegada de cientos de camiones de cascajo y basura, los cuales tiran su carga en estas barrancas que los ejidatarios buscan rellenar para lotificar la tierra. Nadie hace nada para detenerlos”, acusó Ortiz Lozada.
En la sesión del 26 de noviembre de 2019, la Comisión Edilicia de Preservación y Restauración de Medio Ambiente, presidida por el regidor Rodrigo Gómez Orta, citó a comparecer al nuevo secretario de Medio Ambiente de Naucalpan, Jesús King Flores, quien sustituyó a Laura Barranco Pérez, removida del cargo por el cabildo el 30 de septiembre, “porque no cumplía con el perfil”.
Estos tiraderos, alertó la regidora Paulina Pérez González, “son operados por la delincuencia organizada en materia ambiental, por lo que es necesaria la intervención coordinada de autoridades estatales, federales, de policías municipales de la Secretaría de Seguridad del Estado de México e incluso de la Guardia Nacional, porque pese a que algunos han sido clausurados, retiran los sellos y siguen operando”, aseveró durante la sesión de la comisión edilicia.
King Flores y personal de Medio Ambiente de Naucalpan informaron ante síndicos y regidores que documentaron la operación de 19 grandes vertederos de cascajo en las zonas ejidales de San Mateo Nopala, Tepatlaxco y San Francisco Chimalpa.
Gracias al uso de drones —que en algunos puntos fueron baleados— se estableció su ubicación y la información se compartió con las procuradurías Federal de Protección al Ambiente y con la de Protección al Ambiente del Estado de México, así como con autoridades mexiquenses, a fin de determinar si tienen licencia.
