Más Información
Noviembre inicia con 88 homicidios; Guanajuato, Guerrero y Jalisco, de los estados con mayor incidencia
Reforma judicial: JUDEF y estudiantes convocan a marcha; será cuando se discuta proyecto del ministro González Alcántara
emilio.fernandez@eluniversal.com.mx
Ecatzingo, Méx.— En el censo de viviendas dañadas por los sismos de septiembre de 2017 no fueron incluidas 110 de Ecatzingo, municipio ubicado en la región de los volcanes, por lo que sus propietarios no recibieron ayuda oficial de los tres niveles de gobierno y siguen habitando su morada, no obstante el riego que representa.
La alcaldesa morenista, Rocío Solís, dijo que en la inspección realizada por las comunidades que sufrieron daños sólo se contabilizaron 160 inmuebles a los que se les destinó dinero para su reparación, que aún está en proceso.
Las autoridades locales que iniciaron su gestión en enero de 2019 efectuaron una nueva evaluación y detectaron que el número de casas era mayor al que consideraron hace dos años los funcionarios de la pasada administración.
“Nosotros tenemos 110 viviendas que no fueron integradas al padrón de beneficiarios y que tienen daños severos, pero a pesar del riesgo que representa, la gente tiene que vivir ahí porque no tiene el recurso para salirse y construir una nueva”, dijo Solís.
De la región de los volcanes, Ecatzingo fue el municipio del Estado de México con los mayores daños, pues de acuerdo con el Servicio Sismológico Nacional, el terremoto de 7.1 grados de magnitud del 19 de septiembre de 2017, la zona de Tlamacas fue donde más fuerte se sintió.
Ante el retraso de la ayuda gubernamental, muchos de los propietarios de casas dañadas tuvieron que invertir de sus recursos para reconstruirlas, pero requieren más dinero para lograrlo.
Los que sí fueron incluidos en el padrón de beneficiarios tampoco han terminado de rehabilitar su propiedad porque no les han entregado el total de la cantidad autorizada, que fue de entre 15 a 120 mil pesos, dependiendo del tipo de afectación en su inmueble.
David Cervantes Peredo, coordinador del Programa Nacional de Reconstrucción, le dijo a la alcaldesa que las 110 casas dañadas que no fueron contempladas hace dos años, pueden ser integradas al nuevo recuento para que les sean entregados recursos del gobierno federal, pero sería en 2020.
El ayuntamiento podría construirles un cuarto dormitorio con la partida presupuestal estatal que les autorizarán para que las personas no estén en riesgo.
El gobierno local aplicó un millón 200 mil pesos en vivienda, pero realiza gestiones con la entidad para que le sean asignados más de 6 millones de pesos para edificar cuartos en los predios donde hay inmuebles en peligro de caerse.
“Nosotros no podemos reconstruir las 110 viviendas porque es una inversión muy grande, lo único que podríamos ofrecerles a ellos es un cuarto dormitorio”.
El presupuesto anual de Ecatzingo es de 63 millones de pesos, que es insuficiente para atender las demandas de 12 mil habitantes que viven en esa localidad que está en el límite con Morelos.