El gobierno del Estado de México debe emplear mano dura para poner orden en las prisiones de la entidad, en algunas de las cuales existe autogobierno.
Arturo Beteta del Río, dirigente del Centro Coparmex Metropolitano, dijo que “no es secreto que en los penales hace falta mano dura, falta control, y en muchos de los casos existe autogobierno”.
Añadió: “Definitivamente la autoridad se está viendo rebasada por el número de internos y por la corrupción también de los custodios que controlan los reclusos”.
El dirigente empresarial dijo que Maribel Cervantes Guerrero, secretaria de Seguridad del Estado de México (SSEM), aseguró que el sistema penitenciario es una de las prioridades de seguridad del gobernador Alfredo del Mazo Maza y al parecer ya está trabajando en ello.
“Entre los cambios que se están haciendo en el estado, que además nos acaba de decir la secretaria, una de las prioridades es rehabilitar el sistema penitenciario, eso es algo que se tenía que hacer desde hace mucho”, dijo.
Aseguró: “Siempre se puede hacer algo, no va a ser algo sencillo y seguramente tampoco algo rápido, pero siempre hay soluciones que se pueden hacer, desde meter más elementos, más control, tecnología, en su caso subcontratar empresas para que den seguridad o inclusive dar la consignación de los penales a la iniciativa privada”.
La SSEM informó en un comunicado que continúa la revisión de los centros penitenciarios de la entidad y hubo operativos en los penales de Sultepec, Valle de Bravo y Temascaltepec, donde hallaron casi un centenar de objetos prohibidos.
“Como resultado de la requisa se incautaron 93 objetos, entre ellos, celulares, pequeñas dosis de hierba seca con características propias de la mariguana y artículos prohibidos por el reglamento interno de los centros de Prevención y Reinserción Social mexiquenses”, dijo.
Agregó: “Con estas acciones y decisiones firmes, la Secretaria de Seguridad del Estado de México da cumplimiento a la instrucción gubernamental y contribuye a los esfuerzos para lograr una verdadera y efectiva reinserción social de las personas privadas de su libertad por reclusión”.
En menos de un mes se registraron dos disturbios en el penal de Chiconautla, ubicado en Ecatepec, y en el de Neza Bordo, en Nezahualcóyotl, en este último donde reclusos del área llamada La Fortaleza retuvieron a tres custodios y al director de la cárcel, a los que posteriormente liberaron.
Familiares de los internos denunciaron que son extorsionados para visitar a sus familiares, ya que tienen que pagar a custodios y otros internos, además de que existen maltratos y grupos de reos que amenazan a las familias con hacer daño a sus familiares si no depositan cantidades de dinero.
Cervantes Guerrero reconoció, durante una reunión con empresarios ocurrida en Tlalnepantla, que desde el interior de los penales mexiquenses se cometen “muchos delitos”, sobre todo la extorsión.