Toluca, Méx.
Pocas personas saben que el museo Jardín Botánico Cosmovitral es único en su tipo en el mundo, porque expone de forma permanente la obra magna del muralista mexiquense Leopoldo Flores, donde narra a través de vitrales la relación del hombre con el universo y, además, preserva 400 especies de plantas; por ello, la directora del lugar, Alejandra Abraham Jarquín, busca captar la atención del público millennial y también convertir el sitio en patrimonio artístico de la nación.
“Antes sí habíamos llegado a posicionar el Cosmovitral en otras latitudes; sin embargo, las generaciones como los famosos millennials y más jóvenes ya no lo conocen (...) por eso creo que llegó el momento de acercarnos a nuevas generaciones y darle una refrescada, llegar a gente de los 30 años hacia abajo, que creo que va a ser un poco complicado pero no imposible”, apuntó.
El Cosmovitral es el segundo paraje turístico más visitado del Estado de México, después de Teotihuacán, informó la responsable del museo. Tan sólo este año ha tenido un registro superior a los 360 mil visitantes, entre ellos japoneses, israelíes, españoles y de otras nacionalidades.
Es una obra compuesta por 45 toneladas de vidrio soplado, 25 mil kilos de cañuelas de plomo y 500 mil fragmentos de vidrio. Con pequeñas piezas que se convierten en el decorado de una enorme estructura que mide 3 mil 500 metros cuadrados se describe la dualidad universal, la oposición de la noche con el día, de la mujer con el hombre, el bien con el mal.
Con base en la narrativa que explican los dos guías, se trata de una síntesis de expresión cosmogónica. Al entrar, lo primero que se observa es el vitral, con un gran círculo de fuego donde destaca la figura del hombre, recordando la proporción áurea o la perfección en las imágenes.
Aun con la importancia que tiene esta obra y lo que implica para la entidad, Abraham Jarquín lamenta que desde 2015 perdió interés entre el público y no logra colocarse entre las más destacadas o interesantes, especialmente para los turistas jóvenes, es por ello que buscan revitalizar la forma como se promueve el recinto.
“Es difícil comprender la dinámica del lugar; por ejemplo, hay quienes nos cuestionan por qué no hay bancas dentro del sitio o por qué no somos un parque, si hay jardines dentro, o por qué nos catalogamos como museo si no hay pinturas, esculturas u otras expresiones artísticas”, precisó la directora del museo.
Pero enfatiza que el Cosmovitral representa un importante fragmento de la historia de Toluca y del país, pues inició su construcción el 22 de febrero de 1909 como parte de las acciones conmemorativas del Centenario de la Independencia, a cargo del ingeniero Manuel Arratia, quien realizó el diseño con un estilo Art Nouveau, aunque fue inaugurado en 1933. La estructura metálica primero albergó al mercado 16 de Septiembre y funcionó como tal 40 años.
Al principio el sitio albergaba sólo a plantas endémicas del Estado de México, las cuales fueron identificadas y etiquetadas con su nombre científico especie, género y familia, además se explicaba su uso medicinal. El espacio fue diseñado con la asesoría del Jardín Botánico de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM).
Pero en 2015 tuvo una remodelación con una inversión de 31 millones de pesos y desde entonces cuenta con el jardín de plantas aromáticas; además de otro espacio más con diseño japonés, donde también hay carpas koi; también hay una área donde se albergan las cactáceas; tienen árboles frutales, y en el recorrido se pueden observar especies que dan identidad a la botánica del estado y de todo el país.
“Es una lástima que tuvimos que ponerle vitrinas a los cactus, porque la gente joven viene a rayarlos y escribe sobre ellos las iniciales de sus nombres, sus nombres completos y diversas leyendas; por ejemplo, dicen que les parece romántico grabar en las pencas el nombre de su enamorado y no comprenden que dañan patrimonio estatal, ni que las plantas son seres vivos”, explica Abraham Jarquín.
Por ello, enfatiza, buscan renovar el lugar. Explica que la primera acción es lograr que el ayuntamiento de Toluca colabore con la preservación de las inmediaciones, pues a la par del ambulantaje, que se convirtió un obstáculo en el ingreso a este lugar, creció el tiradero de basura en las fuentes que circundan el lugar, las cuales desprenden un olor fético porque son usadas como baños públicos por los manifestantes que protestan en el centro de la capital mexiquense.
“Lo que buscamos es colocar entre los principales sitios de interés para los turistas nacionales y extranjeros este museo, que presenta una muestra permanente de plantas y una maravillosa obra del muralista mexiquense [Leopoldo Flores], donde sin ningún afán religioso se expone la narrativa sobre el bien y el mal, el equilibrio de la humanidad, el hombre y la mujer, acompañado de un domo que resume la cosmogonía donde se reflejan los signos zodiacales”, precisa la encargada del lugar.
