Metepec.- Con cartón, material reciclado, hule espuma y corcholatas, alumnos de la escuela Hábitat crearon una ofrenda para Día de Muertos con piezas de entre dos y tres metros de altura, las cuales representan el arte huichol.
Esto, para ser parte de los altares instalados por instituciones educativas y por los barrios de este municipio mexiquense, que conformarán la ofrenda monumental que pone el ayuntamiento cada año.
Al pie de las escalinatas de la iglesia de El Calvario, en el corazón de este Pueblo Mágico, se observan las catrinas, un perro y una calavera que simulan a las tradicionales de azúcar.
Celeste Cortés, administradora del centro escolar Hábitat, explicó que es un trabajo de estudiantes de arte, quienes desde hace un mes comenzaron con la preparación de las piezas para participar por quinto año consecutivo en este ejercicio del ayuntamiento, que busca preservar las tradiciones y fomentar la convivencia entre la ciudadanía.
Pese a que este año no se observa la presencia de los grupos de familias y de vecinos de esta localidad preparando los altares para sumarse a la ofrenda principal, los pocos participantes que acudieron desde ayer comenzaron el acomodo de sus piezas, que se convirtieron en referencia por la calidad de su muestra.
“Somos una escuela ambientalmente responsable; entonces, lo que hacemos es visitar a empresas de reciclaje y alrededor de septiembre comenzamos a trabajar. Son estructuras de 3.60 metros de altura, elaboradas con diferentes materiales, entre ellas acero, porque los trabajadores hacen la parte de los bastidores y después el departamento de arte y diseño le da forma”, explicó.
La cabeza o calavera que parece de azúcar mide 90 centímetros de altura por 1.50 de ancho y es el tercer año consecutivo que la reciclan, pero en esta ocasión adaptaron todos los detalles a la cultura huichol. La ofrenda está por completo cercada por flores de cempasúchil y algo de nube, además de terciopelo.
Este jueves, la alcaldesa Gabriela Gamboa hará la inauguración de la
, que cuenta con un tapete de piedras de colores, dando forma a una catrina con un gran sombrero y vestido morado, que mide más de 10 metros de largo y que alrededor contará con la instalación del resto de los altares que instalan habitantes y empresarios del municipio.
etp