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Más de 100 trabajadores, gerentes y propietarios de ferias fijas y temporales de la Ciudad de México exigieron al Congreso local intercedan por ellos, para que el Gobierno capitalino y alcaldías acaben los operativos de suspensión y clausura de esos negocios, como consecuencia del accidente que ocurrió en la Feria de Chapultepec.
Luego de manifestarse afuera del edificio de Donceles y Allende, por lo que llamaron una “cacería de brujas” los inconformes aseguraron estar dispuestos acatar y enmendar todas las posibles irregularidades que les señalen.
En las escalinatas del recinto legislativo, el presidente de la Comisión de Protección Civil y Gestión Integral de Riesgos del Congreso local, Héctor Barrera, les ofreció analizar la problemática que enfrentan y pidió al Gobierno capitalino y a las alcaldías suspender momentáneamente los operativos de supervisión, no sin antes revisar la documentación que garantice la seguridad de los usuarios.
Sin embargo, el diputado panista reconoció que será complicado que eso ocurra, debido que a raíz del accidente que dejó dos muertos en La Feria, “el Gobierno de la Ciudad y las alcaldías se dieron cuenta de una serie de anomalías que ponen en riesgo a los usuarios”.