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Ecatepec, Méx.— En la misma zona donde fue encontrado un gran centro de huachicoleo en abril, luego de que se registró una fuga de combustible, ayer se presentó otra en un ducto de Petróleos Mexicanos (Pemex) ocasionada por una toma clandestina en la colonia Tolotzin, por lo que fueron evacuadas de sus hogares 200 personas por el riesgo que existía de que se presentara alguna explosión.
Según el reporte, a las 02:00 horas del miércoles fueron alertados los cuerpos de emergencia de que en la avenida Gobernadora, en su entronque con Gran Canal, se escapaba carburante del ducto Tuxpan-Azcapotzalco, a la altura del kilómetro 291.
Personal de Pemex, Coordinación Nacional de Protección Civil, Guardia Nacional, Protección Civil estatal y municipal, Secretaría de Seguridad mexiquense y la policía municipal acudió al sitio.
Una densa capa de humo blanco se presentó en el área, por lo que las autoridades determinaron desalojar a decenas de familias que están asentadas cerca del punto donde fue hallada la fuga.
Personal de Pemex alertó del riesgo de explosividad por la cantidad de combustible que se había derramado.
Trabajadores de la empresa petrolera recuperaron parte del material que se escapaba con equipo especializado. Los especialistas descubrieron el área de la toma clandestina, por lo que la sellaron.
Los vecinos que habían sido desalojados regresaron horas después, cuando ya no había peligro para ellos, informó Protección Civil municipal.
El ducto Tuxpan-Azcapotzalco tiene una longitud de 311 kilómetros y es considerado la principal red de distribución de combustibles para el Valle de México, pero es asediado el crimen organizado para extraer de manera ilegal el combustible, lo que ha provocado múltiples fugas y percances, expuso el gobierno local.
El 29 de marzo pasado un fuerte olor a combustible en la planta de bombeo El Caracol, en el fraccionamiento Las Américas, alertó a autoridades sobre una fuga que contaminaba el drenaje, por lo que iniciaron investigaciones.
Se detectaron inicialmente dos predios en los que se presume extraían y almacenaban el combustible robado, además de decenas de bidones con capacidad de mil litros cada uno y una red de mangueras subterráneas que conectaban a diversos predios.
Después de catear siete predios, elementos de la Fiscalía General de la República (FGR) y autoridades de Ecatepec localizaron el sitio donde desembocaba la toma.
