La alcaldía Iztapalapa, a cargo de Clara Brugada, inició el programa de desazolve Con drenaje limpio nos preparamos para las lluvias, en el Barrio Santa Bárbara.
Al dar el banderazo de arranque, la alcaldesa dijo que el programa busca garantizar la limpieza del drenaje y la revisión de las tuberías de Iztapalapa, las cuales tienen una longitud de 2 mil kilómetros.
En una primera etapa, el plan abarcará los 37 puntos de mayor riesgo de inundación, es decir, 364 mil metros de tubería.
Por ejemplo las calles del centro de la alcaldía, donde se ubican los ocho barrios, y que confluyen con Ermita-Iztapalapa, serán intervenidos ya que durante las lluvias baja el agua del Cerro de la Estrella.
Las 13 brigadas desazolvarán mil 300 metros al día y, sumados a los 400 metros que hará la Secretaría de Gestión Integral de Riesgos y Protección Civil, serán en total mil 700 por jornada.
Brugada Molina explicó que el Gobierno de la capital del país, por medio del Sistema de Aguas de la Ciudad de México (Sacmex), trabajará para abatir las grandes inundaciones ocasionadas por los hundimientos diferenciales derivados de grietas que se vieron agravados por el sismo de 2017.
Estos hechos han colapsado el drenaje, por lo que la alcaldía emprende el programa de limpieza de la red secundaria de cuyo estado cuenta con un diagnóstico.
“Se abrirá la tapa del pozo y si vemos que hay agua estancada, inmediatamente se harán los preparativos y se empieza a meter las líneas que ayudarán a limpiar y entrará el malacate”, añadió.
Brugada Molina expuso que el año pasado se invirtieron 15 millones de pesos en la adquisición de 26 malacates, máquinas con un mecanismo especial para el desazolve, además de que trabajadores de la alcaldía fueron capacitados.
La edil hizo un llamado a la población para que no tiren desechos en las coladeras para mantener las tuberías en buenas condiciones.
Al respecto, el director de Detección de Fallas y Rehabilitación de Drenaje del Sacmex, Alejandro Munguía Torres, afirmó que este organismo se une al programa que aplicará “una limpieza de albañales, atarjeas y colectores en Iztapalapa, en una longitud de 600 kilómetros aproximadamente”.
Subrayó la relevancia de estar preparados para recibir las lluvias con los ductos libres y a su mayor capacidad hidráulica.