En menos de 72 horas, un grupo de madres buscadoras lideradas por Cecilia Patricia Flores Armenta localizaron fosas, osamentas, credenciales de elector, en lo que denominaron "un crematorio clandestino" en la Ciudad de México.
Por medio de sus redes sociales, Ceci Flores informó sobre el hallazgo de ropa de niños, mujeres en los límites de Iztapalapa y Tláhuac, sin embargo, informó que presuntas autoridades le impidieron el paso al lugar.
La Fiscalía General de Justicia de la Ciudad de México inició las investigaciones "por noticia criminal" y este miércoles 1 de mayo descartó que los huesos encontrados sean humanos, al tiempo que aseguró, tampoco se trata de un crematorio clandestino como lo señaló Ceci Flores.
Tras la información revelada por la Fiscalía General de Justicia de la Ciudad de México y lo expuesto por las madres buscadoras, EL UNIVERSAL realizó un recuento de los hechos.
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El lunes 29 de abril, la fundadora del colectivo Madres Buscadoras de Sonora Cecilia Patricia Flores así como un grupo de integrantes de agrupaciones llegaron para apoyar a los familiares de desaparecidos de la Ciudad de México y el Estado de México.
Las madres buscadoras recibieron una llamada anónima que alertó de un crematorio clandestino desde hace 4 años. El informante les dijo específicamente las coordenadas del lugar, en un cerro al sur de la Ciudad de México, en el volcán Xaltepec, en los límites de Iztapalapa y Tláhuac.
“Nosotros trabajamos por llamadas, pitazos de lugares en donde posiblemente hay desaparecidos. En la Ciudad de México fuimos alertadas de que hay 14 puntos en donde posiblemente hay fosas clandestinas, con cuerpos de nuestros desaparecidos, y este es uno en el que decidimos buscar por la zona en la que se encuentra”, comentó Ceci Flores en entrevista para EL UNIVERSAL.
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El martes 30 de abril localizaron un área utilizada, la cual catalogaron como un crematorio clandestino, en donde se encontraron 30 cadáveres de perros, así como osamentas, además de credenciales, libretas, ropa y zapatos de niños y mujeres, en los límites de las alcaldías Iztapalapa y Tláhuac.
Al llegar al lugar, observaron que la ceniza se encontraba caliente, por lo que algunos voluntarios se quedaron sin zapatos al derretirse con el calor de la fosa.
Ceci Flores denunció que la Guardia Nacional “las dejó plantadas” los dos días de trabajo. Además, la Comisión Local de Búsqueda no les dio apoyo económico, ni herramientas, para que los localizadores pudieran trabajar, pese a que solicitaron seguridad.
“Éramos varios los que estábamos arriba del cerro, algunos de los compañeros habían bajado ya, otros iban a subir a ver el crematorio y cuando todavía no subían se acercó un chico a tomarnos fotos a todos los que estábamos arriba y abajo. Nos tomó fotos a nuestras caras y nos sentimos amedrentadas, por eso salimos del lugar”, explicó la madre buscadora.
Por precaución, los grupos se alejaron del lugar para comunicarse con las autoridades, por lo que se coordinaron para mantener vigilancia y esperar que autoridades de la Comisión Nacional de Búsqueda (CNB) llegaran al área.
“No subimos (a redes sociales) que encontramos los restos de un bebé porque nos robaron los restos. Los encontramos tarde y los resguardamos en la misma fosa. Llegamos, estaba una camioneta blanca subiendo una cubeta y ya no encontramos los restos. Creemos que se los llevaron”, denunció Flores Armenta.
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La Fiscalía General de Justicia de la Ciudad de México informó que se inició una carpeta de investigación en la Fiscalía Especializada en la Búsqueda, Localización e Investigación de Personas Desaparecidas (FIPEDE) por noticia criminal tras la denuncia de las madres buscadoras.
Durante la búsqueda se localizaron un credencial INE a nombre de Laura Angélica, con domicilio en el Estado de México, y una credencial escolar de una Escuela Primaria de la alcaldía Tláhuac.
Elementos de la Policía del Estado de México entrevistó a Laura Angélica, quien refirió que hace aproximadamente un año, mientras circulaba en su automóvil particular sobre Periférico y Eje 6 en la Ciudad de México, fue víctima de robo; en ese incidente, le sustrajeron su teléfono celular, dentro del cual llevaba su INE. Manifestó encontrarse bien.
Además, la PDI entabló comunicación vía videollamada de WhatsApp perteneciente a los padres del menor cuya credencial fue encontrada en el lugar.
Contestó el padre, quien comentó que tiraron algunas libretas de sus hijos, desconociendo si la credencial encontrada se había traspapelado en algún libro o libreta. Además, confirmó que su hijo se encuentra bien de salud, no está desaparecido y todo el tiempo ha estado integrado a su núcleo familiar.
Durante el miércoles 1 de mayo, Cecilia Flores denunció que presuntas autoridades impidieron el paso a la zona de búsqueda en el posible crematorio clandestino. Informó que fue retenida, obligada a bajar de su vehículo y amenazada con quitárselo.
“A unos pocos minutos de llegar al lugar donde nos vamos a reunir con medios y autoridades para ir nuevamente al crematorio que acabamos de encontrar, somos detenidos por autoridades, nos quieren quitar los dos vehículos en los que nos trasladamos.
El Secretario de Gobierno de la CDMX, Ricardo Ruiz, sostuvo que las autoridades capitalinas han brindado apoyo y están atentos a lo que requiera la coordinadora de Madres Buscadoras de Sonora, Cecilia Flores, en su labor de búsqueda en Iztapalapa, por lo que rechazó que obstaculicen su trabajo.
El miércoles 1 de mayo, por medio de su cuenta de X, antes Twitter, Flores Armenta informó que ha localizado más de 2 mil 700 restos, por lo que "no necesita que se estudien los huesos" encontrados en Iztapalapa.
“Sé a qué huele la muerte y cómo se acarician los huesos que se vuelven cenizas de quien un día respiró. No necesitamos que estudien los huesos de los perros, gatos y lagartijas atoradas en el barranco que tiene 100 metros de profundidad”, escribió.
La líder de las madres buscadoras de Sonora Cecilia Fores solicitó apoyo para que alguien les presente una retroexcavadora por unas horas, debido a que un anónimo menciona que allí se encuentran los cuerpos.
El grupo de madres buscadoras se encuentra en Zapotitlán realizando trabajos con picos y palas que ellos llevaron, sin embargo, cuentan con recursos limitados.
“Urge una retroexcavadora, con unas 4 o 5 horas puede terminar de hacer todo el trabajo que nosotros hemos hecho en 3 días, no nos podemos rendir”
Con información de Alhelí Salgado, Amalia Escobar, Yalina Ruíz y Alberto Acosta.
ss/cr