Toluca, Méx.— Pese al rezago en la instalación de cámaras de videovigilancia, GPS y las quejas por la calidad del servicio, el gobierno del Estado de México autorizó el alza en dos pesos —los concesionarios pedían 4.50 pesos— al costo del transporte concesionado que impactará a 6 millones de usuarios.
El secretario de Movilidad (Semov), Raymundo Martínez, dijo en entrevista con EL UNIVERSAL que el ajuste se trata de una alternativa para avanzar en la regularización de las unidades, instalación del equipamiento tecnológico de seguridad y capacitación de los conductores.
Tras anunciar que a partir del 1 de enero de 2020 el costo del pasaje mínimo pasará de 10 a 12 pesos los primeros 5 kilómetros, más 25 centavos por kilómetro adicional, el funcionario reconoció que fueron ocho meses de negociación para disuadir el amago de los líderes transportistas para llevar a paro el servicio de no lograr el ajuste, aunque el incremento no es “un cheque en blanco”, porque deberán cumplir con el ordenamiento del sector.
Al respecto, Odilón López Nava, presidente de la Cámara Nacional de Autotransporte de Pasaje y Turismo (Canapat), calificó como “necesario” el aumento debido a las alzas que golpearon este año al sector, aunado a la falta de orden, pues casi la mitad de las unidades que prestan el servicio en territorio mexiquense son irregulares.
Vicente Álvarez, presidente de la organización de taxistas COCCEP, dijo que si se quiere “un buen servicio de transporte, lo hay, sólo que debemos pagar por ello”.
El titular de la Semov admitió que de 150 mil concesionarios, sólo 13 mil tienen kit de seguridad que incluye cámaras de videovigilancia, GPS y botones de pánico.
Faltan por regularizarse 43 mil permisos que ya están vencidos, a los que se sumarán 20 mil más que perderán la vigencia en 2020.
Sin embargo, apeló a que el incremento en la tarifa permitirá avanzar con mayor fuerza en la regularización, sobre todo en una segunda etapa que incluye la certificación de 100 mil operadores cada año.
Subrayó que los transportistas se comprometieron a concluir al 100% el proceso de renovación de unidades y ofrecer un servicio de calidad y seguro. Además, recordó que en la entidad no hay subsidios al transporte de mediana capacidad como ocurre en otros estados.
Explicó que en el Valle de México se realizan 34 millones de viajes diarios, de esta cifra, 17 millones se dan en 58 municipios del Estado de México, de los que 60% son en unidades de transporte público, “de ahí la importancia de inhibir la delincuencia”.
Reiteró que apuestan por una plataforma tecnológica que aglutine a todas las unidades, así como el establecimiento de un sistema de prepago en el que tanto operadores como usuarios estarán plenamente identificados, a efecto de inhibir la comisión de delitos en el transporte público.
Diputados de Morena reprocharon el aumento que pega al bolsillo de las familias mexiquenses y advirtieron que desde la Legislatura buscarán modificar la normatividad para evitar que se tomen decisiones de este tipo que afectan a las familias, pero que no tocan a los concesionarios irregulares.
A través de redes sociales, ciudadanos convocaron a una manifestación en contra de la medida que ya está publicada en la Gaceta de Gobierno estatal desde ayer, pues alegan que el servicio es inseguro e indigno.