En el primer día del cierre de 12 de las 20 estaciones de la Línea 1 del Metro por trabajos de modernización no se registraron aglomeraciones para subir a las unidades de la Red de Transporte de Pasajeros (RTP), toda vez que se reforzó el operativo con más camiones, incluso del Mexibús. Sin embargo, el tiempo de traslado de los usuarios se incrementó y algunos hicieron hasta una hora de Pantitlán a Balderas, por lo que las autoridades recomendaron anticipar su salida.
El secretario de Movilidad, Andrés Lajous, dijo a EL UNIVERSAL que “sí considero que hay una afectación en el tiempo, estamos hablando de 15 minutos hasta media hora adicionales a la que hacían antes, [lo tienen que tomar en cuenta] para que puedan planear mejor su viaje”.
“Hay mucho tráfico y estuvo muy largo el trayecto, buscaré otras opciones”, dijo Norma Angélica Vilchis, quien subió a una de las 300 unidades de la RTP.
Dijo que abordó el camión a las 9:50 horas, en Pantitlán, y llegó a Balderas a las 11:23 horas. “Más de una hora de trayecto cuando antes hacía media hora o 40 minutos”, sostuvo.
Caso similar fue el de Ana Ramos. “Me fue de la jodida porque hay mucho tráfico, vengo en el directo y salí 20 minutos para las ocho de Zaragoza y apenas voy llegando [8:40 horas]. Hay mucho tráfico. No tengo idea con cuánto tiempo de anticipación tenga que salir, la ventaja es que no tengo una hora fija de entrada al trabajo. Pero sí, voy a salir más temprano para llegar más temprano o no sé, pero sí tenemos que apurarnos más y madrugar más”.
En un recorrido por la ruta de la RTP, que es paralela al tramo cerrado, EL UNIVERSAL observó que los camiones enfrentaron tránsito vehicular en Eje 4 Oriente y calzada Ignacio Zaragoza para llegar a los paraderos provisionales de Pino Suárez y Balderas.
En San Lázaro, las unidades se llenaron, pues ahí hay conexión con la Línea B del Metro y con vehículos de transporte público procedentes del Estado de México. Ahí también había personas que iban con maletas a la terminal de autobuses TAPO.
El tránsito vehicular y la desorientación de usuarios fue lo que predominó en el viaje, porque los pasajeros no distinguían cuál estación del Metro coincidía con el punto de descenso; además, los choferes no daban detalles y son poco visibles los letreros del nombre de la estación.
Los puntos conflictivos en el trayecto, por el comercio del Mercado Sonora, está entre las estaciones La Merced y Candelaria.
En hora pico, de 7:00 a 10:00 horas, los camiones RTP lucieron semillenos y con un ritmo de salida constante. En Pantitlán, además del personal del Gobierno capitalino, estuvieron elementos de la Guardia Nacional, quienes brindaron información a la ciudadanía. Estuvieron secretarios desplegados en la ruta.
Entre los refuerzos, las autoridades sumaron a las 220 unidades de RTP anunciadas, 300; se habilitó un servicio exprés en el Eje 1 Norte, con 10 unidades de Mexibús, que usó el carril de la Línea 3 del Metrobús y hubo 21 vehículos de transporte privado.
Pagan doble pasaje
Muchos usuarios pagaron doble pasaje porque no cuentan con la Tarjeta de Movilidad Integrada. Personal de Semovi, con megáfono en mano, les recordó que con el plástico pueden hacer el transbordo gratuito entre RTP y Metro, pero varias personas no contaban con ella y desembolsaron cinco pesos y pagaron después un boleto del Metro, es decir, 10 pesos en una ida.
Andrés Lajous recordó “que con la tarjeta pueden hacer el transbordo gratuito entre Metro y RTP. Entonces, si te subes al Metro y pagas con la tarjeta, cuando te subas al RTP ya no se te cobra; si te subes al RTP y después al Metro, tampoco”.