Con “creatividad, pasión y esfuerzo”, electricistas, herreros y soldadores fabrican las piezas que iluminarán las fachadas de los edificios del Zócalo de la Ciudad de México durante las .

Con rafia, alambrón, mangueras de luces led, escarcha de colores y el ambiente de música de banda en una bocina en el campamento Superpostes Central de Abasto, de la Dirección de Alumbrado Público de la Ciudad, vistieron las estructuras metálicas que, en conjunto, formarán un colorido calendario azteca que será colocado entre la calle 20 de Noviembre y la Plaza de la Constitución.

Al aire libre, bajo unas enormes láminas que los protegen del sol, los trabajadores dejaron ver la agilidad que les han dado años de experiencia en el armado de estructuras luminosas.

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Uno de los herreros que desde las 7:30 horas labora en el armado de las piezas es Javier del Oso. Asegura que el equipo de 110 empleados, del que siente orgulloso, pone “creatividad, pasión y esfuerzo” para que la gente se lleve un bonito recuerdo de las fiestas patrias.

“Cuando era joven, mis papás me llevaban a ver las luces del Zócalo, yo les decía que qué flojera. Ahora que estoy de este lado, es diferente (…) la gente piensa que sólo es llegar y poner las figuras en los edificios, pero hay todo un proceso, desde armar con las varillas, hasta que mis compañeros ponen las mangueras de luces”.

Javier ejerce el oficio desde hace 17 años, mismo que le ha dado muchas satisfacciones, como haber tenido la oportunidad de que su hijo encendiera el alumbrado en la ceremonia oficial en 2017.

Mientras algunos trabajadores se dedican a soldar varillas, otros desenredan largos metros de alambrón que usan para poner festón y mangueras con luces led.

Parte del material requerido para la decoración se ha reciclado durante unos cinco años. Foto: Gabriel Pano / El Universal
Parte del material requerido para la decoración se ha reciclado durante unos cinco años. Foto: Gabriel Pano / El Universal

La labor es cansada, pues en ocasiones tienen que pasar largos minutos de rodillas cortando varillas o haciendo trazos guía en el piso con un gis. De las cosas más difíciles son las quemaduras que se han llevado algunos soldadores, como Víctor Hugo Béjar.

Él es electricista desde hace 25 años y espera que a la gente le agrade la decoración, pues en años pasados se ha sentido orgulloso.

“A mí me gusta más la instalación, subir a colocar las piezas. Ya listas, años anteriores, las llevamos de aquí al Zócalo y ya con grúas allá las montamos. A mí, en lo personal, me gusta más esa parte, por ahora toca estar en el taller, pues también tiene un proceso y aunque es cansado, se disfruta también”, contó.

Este año, la iluminación representará una transición desde el México prehispánico hasta la Independencia, explicó Alberto González Castro, diseñador de alumbrado decorativo.

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“Será una panorámica con elementos prehispánicos, una perspectiva desde el juego de pelota hasta la Independencia, con bustos de héroes y heroínas de México”, dijo el funcionario.

Para la Piedra del Sol que se colocará en la parte central de los edificios de Gobierno, se utilizarán 2 toneladas de varilla de estructura, 12 mil metros de festón y 5 mil metros de manguera luminosa multicolor, materiales que “se vienen reciclando hace cinco años”.

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