Coacalco, Méx.— Sin un plan definido, la tarde de ayer iniciaron los recorridos por vialidades del Valle de México de transportistas que integraron grupos de autodefensa, con los que buscan terminar con las extorsiones y asaltos que sufren desde hace varios años.
En Coacalco se concentraron en el estacionamiento de una tienda de autoservicio ubicada en la vía José López Portillo y después de que llegaron sus compañeros de otras organizaciones en caravana, procedentes de la caseta de peaje de Tepozotlán, salieron en unidades concesionadas y vehículos particulares, entre ellos motocicletas, hacia las bases ubicadas en el municipio.
La mayoría de los transportistas portaron una playera negra y gorra con la frase “En defensa de mi trabajo” y abordaron vehículos para comenzar sus rondines de vigilancia.
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Iban armados con palos, tubos y piedras, por si encontraban a miembros de agrupaciones delictivas que los amenazan para exigirles dinero a cambio de no hacerles daño o quemar sus unidades.
Sobre la vía José López Portillo circularon decenas de vehículos, incluso por el carril confinado de la Línea 2 del Mexibús, hacia las colonias de Coacalco, algunas donde han sido víctimas de los extorsionadores y que presentan alta incidencia delictiva. Una de ellas fue la base localizada en la calle Lila y boulevard Las Rosas, en Villa de Las Flores, donde el martes 1 de agosto, presuntos extorsionadores le prendieron fuego a una vagoneta, porque su operador se habría rehusado a pagar la cuota exigida.
Jafet Sainz Villarreal, dirigente de la Alianza de Autotransportistas y Comerciantes Metropolitanos (Acme), antes de iniciar los recorridos, dijo que están cansados de las extorsiones y que ya no se dejarán y responderán de la misma manera que los delincuentes.
Le advirtieron a la Fiscalía General de Justicia del Estado de México, con la que tuvieron reuniones el fin de semana luego del amago que lanzaron la semana pasada de crear autodefensas, que si no detiene en las próximas horas a los responsables de la quema de la vagoneta de la ruta 44 en Villa de las Flores, lo harán ellos porque ya saben quiénes son y dónde localizarlos.
Según los transportistas, en lo que va del año aproximadamente 2 mil unidades han sido robadas, quemadas o dañadas por miembros del crimen organizado y las autoridades de los tres niveles de gobierno no han erradicado esas actividades ilegales ni aprehendido a los supuestos responsables, por lo que ellos mismos se protegerán aunque represente un riesgo hacerlo.
Ante este movimiento, la Fiscalía General de Justicia del Estado de México no emitió postura.
El viernes pasado, funcionarios de la fiscalía se reunieron con una comisión de permisionarios y les informaron que trabajan para detener a los probables responsables del ataque a uno de los operadores de la ruta 44, al que le quemaron su unidad en Coacalco la semana pasada y continuarán con las investigaciones para resolver los delitos cometidos contra ese gremio.
En Nezahualcóyotl, permisionarios de la zona oriente del Estado de México anunciaron que en los próximos días se crearán grupos de “reacción inmediata”, que estarán acompañados por elementos de seguridad pública de los municipios mexiquenses para tratar de erradicar las extorsiones, amenazas y agresiones de las que dicen son objeto por parte de bandas criminales.
“No vamos a estar armados, yo creo que vamos a tratar de trabajar esto con las policías locales, porque tampoco podemos correr un riesgo, si alguien nos toca nos levantamos todos los demás”, comentó Víctor Ruiz, presidente de la ruta 42.
Los concesionarios realizarán “detenciones ciudadanas” en contra de extorsionadores, quienes exigen hasta 800 mil pesos por mes, a cambio de no hacerles daño.