Con las cámaras de video externas colocadas en las unidades, las autoridades del Metrobús, en coordinación con policías de Tránsito de la Secretaría de Seguridad Ciudadana (SSC) de la Ciudad de México, pusieron en operación una estrategia para disminuir el número de invasiones al carril confinado.
Desde el nuevo Centro de Control del sistema de transporte público, los supervisores monitorean en tiempo real cada uno de los 900 autobuses que en su parte frontal externa tienen instalada una cámara de videovigilancia que revisa el entorno del tramo recorrido, con el objetivo de identificar a los vehículos infractores que ingresan a su carril.
El personal del Metrobús anota el número de la placa, la envían a los efectivos de Tránsito, quienes se encargan de levantar la infracción correspondiente.
La estrategia consiste en revisar desde el “cerebro del Metrobús” —como se le llama al nuevo Centro de Control—, de forma constante, las rutas de las siete líneas, una vez que es identificado un vehículo que invade la vía exclusiva, trabajadores se ponen en contacto con el operador para que acerque la unidad al auto o motocicleta que trasgredió el reglamento de Tránsito y así, de inmediato, capturar la placa y enviarla a Tránsito, en donde proceden a colocar la sanción.
“Con estas acciones buscamos que se sancione el mal uso de nuestro carril confinado, nos puede generar un accidente cuando se invade y eso nos afecta la operación (…) estas estrategias también buscan, sobre todo, que se sancione, se prevenga y se tenga esta presencia de los elementos de la SSC cuando salimos a operativos en algunas de las zonas que llegamos a observar mayor invasión”, explicó la directora general del Metrobús, Rosario Castro Escorcia, en entrevista con EL UNIVERSAL.
Agregó que los monitoreos permiten a las dependencias identificar las zonas o focos rojos en las que las invasiones al carril exclusivo son más recurrentes, así como los horarios tope de dichas incidencias.
“Hemos detectado algunos tramos en donde hay mayor congestionamiento y luego observamos invasión del carril; por ejemplo, en la Línea 2, en la zona de UPICSA, es un tramo que tenemos identificado de invasión; al sur de nuestra Línea 1, en la zona de La Joya, Villa Olímpica también hemos tenido operativos, también en la zona de la Línea 6, en el tramo de Martín Carrera, es una zona de congestionamiento vial; y llegamos a observar mayor congestionamiento en la Línea 4, en la parte central”, expuso la funcionaria.
“Es en cuestión de segundos que se llevan su infracción, entonces, si invaden, la pagan”, recalcó Castro Escorcia, quien invitó a motociclistas, a automovilistas, así como a operadores de transporte público, a ser respetuosos de la vialidad destinada para ese medio de transporte que a diario traslada a cerca de 1.8 millones de usuarios.
En lo que va de este año suman 244 mil infracciones por invasión a la vialidad destinada para la circulación del Metrobús, es decir, unas 700 por día.
Las sanciones por cometer esta falta oscilan entre 4 mil y 6 mil pesos, lo que representa 2.8 millones de pesos en una jornada de servicio si se tomara en cuenta la cantidad mínima de la infracción.