Toluca, Méx.— Los sectores restauranteros, bares y comercios representados en las cámaras empresariales del Estado de México coincidieron en que son el eslabón más débil ante la ola de extorsiones que, según la Secretaría de Seguridad estatal, incrementó 71% el año pasado, siendo la zona sur la más afectada actualmente.
Por su parte, Gilberto Sauza, presidente del Consejo de Cámaras y Asociaciones Empresariales de la entidad (Concaem), informó que son víctimas de tres modalidades del delito: la extorsión en carreteras, que es la más reportada y en la que perciben más avance, pues han desarticulado incluso bandas dedicadas a ello; la telefónica, y el cobro de derecho de piso, especialmente en Ecatepec y el sur del estado.
Indicó que los empresarios no cuentan con un banco o un registro de números desde donde llaman para extorsionar, ya que es imposible para este sector desempeñar una tarea que corresponde a las autoridades; sin embargo, “sí podemos decir que cada día va aumentando”, por lo que se han blindado.
Reclamó que desde hace años se sabe que las llamadas de extorsión provienen en buena medida de los centros penitenciarios, pero sólo las autoridades pueden solucionarlo con medidas de inteligencia, debido a que al sector empresarial lo que le corresponde es la capacitación para actuar ante llamadas de extorsión y la prevención del delito, en conjunto con las autoridades de la Fiscalía de Justicia estatal y la Secretaría de Seguridad.
Rechazó que cuenten con datos específicos sobre las pérdidas que ha implicado para los sectores productivos este delito, y dijo que no es un impedimento para que los inversionistas decidan asentarse en la entidad por temor a la inseguridad.
Por otra parte, durante la reunión del grupo de Coordinación Territorial para la Construcción de la Paz en el Estado de México —la cual se llevó a cabo en la zona sur de la entidad y estuvieron presentes autoridades estatales y federales— los presidentes de asociaciones de taxis, tablajeros, hoteleros, lugares turísticos, artesanos, restauranteros y miembros de la Cámara Nacional de la Industria de Restaurantes y Alimentos Condimentados (Canirac) expusieron que el turismo se ha visto afectado en esta región debido a la inseguridad que se ha presentado en la entidad.
Expresaron que debe existir una corresponsabilidad entre autoridades y empresarios para sumarse en la cultura de la denuncia y atacar la violencia que afecta al sector turístico en todas sus formas, y con ello reactivar la economía con la creación de empleos y se evite cerrar comercios y establecimientos que a su vez alejen a visitantes y turistas.