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Los incidentes en los que conductores de Uber se han visto involucrados en varios estados del país obligó a los directivos del consorcio a mejorar las medidas de seguridad.
Ahora aplican filtros más seguros, exámenes sicométricos de mayor precisión y trabajan de la mano con las autoridades de seguridad, proporcionando de inmediato los datos del chofer y socio involucrado.
Estas medidas impidieron el año pasado que más de 40 mil personas se convirtieran en socios conductores y 200 mil no lograron si quiera abrir cuentas de esta aplicación.
Según las estadísticas de Uber, esto representa que fueron rechazados más de 5% de quienes intentaron trabajar ahí, respecto a 2016.
En este sentido, Federico Ranero, director general de Uber México, destacó que la seguridad aumentó también en los usuarios.
Desde el segundo semestre del año pasado, analizan los perfiles en redes sociales (Facebook principalmente) de quienes pretenden ser choferes y clientes. Por ejemplo, para quienes pagan en efectivo, hasta septiembre de 2017 más de 200 mil usuarios no lograron darse de alta en Uber por no tener un perfil válido en la red social mencionada, con lo que se terminan también con las llamadas “cuentas falsas”.
“Tener más información sobre nuestros socios conductores y usuarios genera un ambiente de mayor tranquilidad para todos. Para Uber, la seguridad es nuestra prioridad, seguiremos trabajando en implementar más filtros y funciones dentro de la aplicación para que cada uno de los viajes sea una experiencia segura y confiable; el número de anomalías es mínimo, si tomamos en cuenta todos los servicios que prestamos, pero buscamos que no se registre ni una inconformidad”, argumentó.
“Hemos anunciado una inversión pública en 2017-2018 de 6 mil 850 millones de pesos y la mayoría fue para seguridad. Por ejemplo, a los que pretenden ser conductores, los revisamos en más de 500 bases de datos de diversas procuradurías locales y federales, incluso en estados fronterizos y tenemos la certeza de quién hace el examen”, dijo Ranero en entrevista con EL UNIVERSAL.
En lo que se refiere a socios conductores, el proceso de ingreso que actualmente tiene Uber tiene tres etapas: la primera es el filtro de documentos personales, que incluye presentar una carta de no antecedentes penales; la segunda, un examen sicométrico, y la última, aprobar un filtro de confianza, aquí alrededor de 25% de los documentos que se presentan son rechazados.
De acuerdo con sicólogos, una prueba sicométrica diseñada correctamente es una herramienta poderosa para identificar individuos que pueden incurrir en actos delictivos, ya que mide aptitudes, personalidad, disposición y valores que son indicadores de comportamientos relacionados con seguridad.
“Creamos también un seguro para los usuarios y conductores que te da la garantía de que si algo pasa, nosotros respondemos”, informó.
“A Uber no le corresponde hacer justicia, eso compete a la autoridad; sin embargo, cuando un socio se ve involucrado en un incidente, nosotros colaboramos en ellos de inmediato y proporcionamos la información con que contamos, lo que permite la pronta resolución de cualquier situación anómala”, dijo.