El segundo día de suspensión del servicio en tres estaciones de la Línea 1 del Metro, la situación cambió diametralmente, no hubo empujones ni jaloneos entre los usuarios que querían viajar entre las paradas de Chapultepec a Observatorio.
Los policías ordenaban a la gente en filas dependiendo del destino, incluso se puso en marcha una ruta exprés con los autobuses de los granaderos de la policía capitalina.
“No sé cómo les fue a mis compañeros ayer, pero yo he estado aquí desde las cinco de la mañana y no hemos tenido problema alguno, todo está fluido, de a ratos hasta se juntan los camiones y la gente está tranquila”, relató una mujer con la cara blanca de tanto bloqueador solar y que portaba chaleco de la Secretaría de Movilidad (Semovi), quien con megáfono en mano dirigía a los usuarios que salían de la estación Chapultepec hacia los camiones de la Red de Transporte de Pasajeros (RTP).
El horario de mayor demanda de transporte, comentó, fue entre las 6:00 y 8:00 horas, pero aseguró que en todo momento se mantuvo el control a pesar del tráfico y la concurrencia.
Pese a que el accidente del Metro en la estación Tacubaya tuvo una gran difusión, hubo usuarios que no sabían lo que estaba pasando y por qué el servicio se suspendía en Chapultepec.
En un recorrido realizado por EL UNIVERSAL en la zona del conflicto, se documentó que el tiempo de espera para salir de los camiones era de cinco minutos, aproximadamente, cuando el miércoles la situación era completamente caótica.
En los andenes la salida de los usuarios era más difícil, no atinaban a encontrar la salida.
“Si va para Observatorio, suba las escaleras, de vuelta a la derecha y siga los letreros”, gritaba un hombre joven de tez blanca con uniforme de vigilancia del Metro para que los vagones fueran desalojados rápidamente.
Las paredes de la estación están tapizadas de cartelones color verde fosforescente con flechas negras que indican a las personas el camino que deben seguir para tomar los camiones o las patrullas de la policía para continuar con su camino.
Además, hay elementos de la policía que auxilian a todo aquel que confundido pregunta: “¿El que es gratis de dónde sale?”.
También los camiones y camionetas de la Subsecretaría de Tránsito y la Policía Preventiva se sumaron al transporte.