Ante la mirada de cientos de miles de espectadores, en la Macroplaza de Jardín Cuitláhuac, Herodes y Poncio Pilato encabezan el juicio del Cristo de Iztapalapa.
Luego de una serie de acusaciones, los fariseos sugirieron azotar y crucificar al Cristo de la 176 representación de la Pasión de Iztapalapa.
"Senténciale, senténciale", gritó un grupo de fariseos que pidieron a Herodes y a Poncio Pilato que Jesús sea crucificado.
El acusado de blasfemo y sedición, fue traicionado el día de ayer por Judas, uno de sus más cercanos discípulos a cambio de unas monedas de oro, por lo que en estos momentos recibe un castigo de azotes.
"Los azotes no son suficientes, le falta más castigo, hay que pedir la muerte de cruz, sí, la muerte cruz", exigieron los inconformes.
Además del castigo y muerte, los fariseos solicitaron al gobernador que dejen en libertad a Barrabas, un criminal peligroso.
Esta escena forma parte de la 176 representación de la Pasión de Cristo en Iztapalapa.