Un hombre ingresó por la azotea a una tienda Elektra, ubicada en la alcaldía Iztapalapa, y se llevó 50 modelos diferentes de teléfonos celulares; el robo fue valuado por el gerente de la sucursal en 150 mil pesos.
De acuerdo con lo asentado en la carpeta de investigación CI-FIZP/IZP-4/UI-1 S/D/00083/01-2020, los hechos se registraron el pasado 9 de enero, en la sucursal ubicada en Ermita Iztapalapa 1328, justo en el cruce de las calles La Estrella y Morelos.
El encargado de seguridad explicó a los efectivos de la policía y al agente del Ministerio Público de la Coordinación Territorial de Iztapalapa-4, que únicamente alcanzó a escuchar las alertas, pero que no vio al sujeto que había ingresado a la tienda.
Por lo anterior, los agentes investigadores y peritos recabaron los primeros indicios para iniciar con la carpeta de investigación por el delito de robo.
A través de las cámaras de seguridad, el gerente, el encargado de seguridad y uniformados tomaron conocimiento del modus operandi que utilizó el sujeto, quien desde la azotea rompió una lámina de fibra de vidrio para ingresar hasta un cuarto que sirve de comedor para los empleados.
Entró hasta el área donde se encontraban los aparadores con los equipos y comenzó a romperlos y se llevó 50 artículos, sin que fuera detectado por las autoridades.
Entre las piezas robadas, las autoridades investigadoras lograron establecer, gracias a los inventarios presentados por el gerente de la tienda, que lo robado consistió únicamente en telefonía móvil, de las empresas Unefon y OUI, con un valor de 150 mil pesos.
Tras estos hechos, las autoridades investigadoras no descartan que detrás de estas operaciones se encuentre una banda dedicada al robo de negocios en el oriente de la Ciudad, justo en las alcaldías Iztapalapa e Iztacalco.
El pasado 5 de enero, una banda de 10 delincuentes ingresó a una tienda Coppel, ubicada a tan sólo unos metros de la estación del Metro Iztacalco, de donde se llevaron varios equipos telefónicos de última gama, valuados en un monto aproximado de 40 mil pesos.
En aquella ocasión, estas personas, que tampoco fueron identificadas por las autoridades, ingresaron a plena luz del día a la sucursal para asestar el golpe.