Martina acudió la tarde del viernes al Ministerio Público de Cuauhtémoc-2 para denunciar los malos tratos que recibió de parte de los funcionarios que la atendieron cuando se acercó a interponer una denuncia por violencia familiar, pero el trato no cambió.
Luego de una discusión con su pareja sentimental, éste la agredió, la “cacheteó” y la “jaloneó”, lo que le dejó marcas en el cuerpo, afirmó. Al momento que le pidieron pasar al médico legista, grande fue su sorpresa al encontrar a dos hombres que le explicaron que en ese momento no había una médico mujer, por lo que la obligaron a desnudarse para una revisión, de lo contrario, le anunciaron, su denuncia no podía proceder.
La víctima les explicó que los moretones los traía en los brazos y una mejilla enrojecida por un golpe. “Es parte del protocolo”, le respondieron los médicos y Martina no tuvo más opción que quedarse en ropa interior para que le revisaran las marcas en los brazos, “fue un momento muy incómodo, sigo sin entender por qué me tenía que quitar toda la ropa para que me revisaran un brazo.
“De nada sirve que la señora fiscal diga que va a cambiar todo, entiendo que no es magia ni de un día para otro, pero un poco de congruencia o vergüenza deberían tener. Llegas a los ministerios públicos y no hay mujeres para que revisen a las mujeres, me dijeron que me revisaban ellos o tenía que esperar a que le hablaran a una médico, entonces, ¿cuál es el cambio?, son mentiras, todo sigue igual”, comentó la mujer.
En un recorrido aleatorio que realizó EL UNIVERSAL por los ministerios públicos de las alcaldías Cuauhtémoc, Miguel Hidalgo y Benito Juárez, horas después de que la Fiscalía General de Justicia de la CDMX entró en funciones, usuarios estaban molestos por la tardanza en la atención y en algunos casos de la falta de información o “el mal humor” de los funcionarios, algo que, aseguraron, desalienta la denuncia.
Otros pidieron tiempo y confiar en que los cambios se puedan palpar gradualmente.
“Pues eso de que una denuncia se hará en 15 minutos lo quiero ver, hay que confiar un poco porque se entiende que es un proceso lento, pero la verdad es que las promesas no van a servir de nada si se tiene a la misma gente que por años ha trabajado aquí y que lo hace todo de mala gana, lo idea es que eso también cambie”, explicó Margarita Vela, en Benito Juárez.