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El Sistema de Transporte Colectivo (SCT) Metro se deslindó de toda responsabilidad en el retiro de locatarios de la estación Hidalgo, pues aseguró que fue en la administración de Marcelo Ebrard Casaubon cuando se ordenó su salida y se otorgó un Permiso Administrativo Temporal Revocable a la empresa ACCO, para que operara esos espacios.
Si los que se dicen afectados quieren regresar tendrán que negociar con la empresa, cuyo permiso vence en 2022.
Así lo demostró el encargado de despacho de la Dirección General del Metro, Jorge Jiménez Alcaraz, quien aseguró que en ningún momento se ha cometido una irregularidad, pues el STC está cumpliendo con el permiso y la relación jurídica que mantiene es sólo con el permisionario.
Jiménez recalcó que el Metro actúa conforme a los términos del acuerdo y que derivado de la contratación la empresa debe pagarle una contraprestación por el uso y explotación del espacio, del que no dio cifras.
Nosotros, explicó el funcionario, no los quitamos ni tampoco ofrecimos reubicarlos, y enfatizó que es falso que se esté favoreciendo a alguien en particular.
En tanto, el presidente de la Asociación de Locatarios del Metro, Roberto Valdez Gómez, informó que fue interpuesta una denuncia ante el Consejo de la Judicatura Federal para que el Metro devuelva los locales que fueron quitados a los comerciantes de la estación Hidalgo, para otorgárselos a la empresa ACCO.
Advirtió que están dispuestos a llegar hasta la Suprema Corte de Justicia de la Nación para que sean reinstalados, pues de manera arbitraria e ilegal los expulsaron para privilegiar a empresas amigas.
Cuestionó que su retiro haya sido bajo el supuesto de que ya no podían permanecer por cuestiones de protección civil y de movilidad, cuando tras su desalojo se han entregado concesiones a empresas particulares.