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Los robos a comensales que se han registrado durante este año marcaron para las autoridades una línea clara de investigación, pues en todos los atracos los delincuentes buscan preferentemente los teléfonos celulares, aparatos que también los han delatado; gracias a la tecnología son rastreados por el GPS, lo que a la postre los lleva a prisión.
En el robo más reciente a un restaurante Chili’s, los agentes investigadores aparentemente ya ubicaron a los asaltantes por medio de los celulares que robaron.
Luego de revisar las cámaras de vigilancia colocadas sobre el Eje 8 ubicaron la ruta de escape del vehículo en el que huyeron los delincuentes, un Chevrolet Spark gris que tenía varios golpes aparentemente por choque. Las cámaras siguieron la unidad hasta que se perdió calles antes de entrar a la colonia Doctores, en la delegación Cuauhtémoc.
Después, al rastrear los teléfonos, éstos aparecieron también en el mismo sector. En la zona las autoridades tienen detectada a una banda que aparentemente es responsable de algunos de estos atracos. Operan en la Narvarte, Del Valle, Portales y la Roma-Condesa; se refugian en los límites de la Doctores y la Obrera, para después en los puestos ambulantes vender, casi de inmediato, todos los celulares.
Según la carpeta de investigación BJ-3/UI-2S/D/6324/11-2017, el Spark no tenía medallón sino un hule. Los comensales del Chili’s detallaron a las autoridades que la noche del miércoles tres personas asaltaron el lugar y en menos de un minuto despojaron a 10 clientes que se encontraban viendo el partido América contra Tigres, de siete celulares, cinco bolsas de mano, cuatro carteras y un reloj. “Me dijo: ‘Dame tus cosas y no te muevas, si no te doy un balazo’”, contó una víctima a los agentes que acudieron al lugar.
