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david.fuentes@eluniversal.com.mx
Luego de dos peritajes realizados por especialistas, la procuraduría capitalina concluyó que la atracción de la Feria de Chapultepec conocida como La Quimera, en la cual dos personas murieron y dos más resultaron heridas al descarrilarse uno de los vagones el pasado 28 de septiembre, operaba bajo condiciones inseguras graves por la falta de mantenimiento.
De acuerdo con los análisis practicados, el día de la tragedia, el juego mecánico no era apto para el público, pues estaba disminuido 50%, es decir, en teoría no debió operar, aun así los empleados y administradores de La Feria decidieron abrirlo al público, por lo que ahora la dependencia buscará imputar a quienes resulten responsables por los delitos de homicidios y lesiones culposas, que pueden ser personas físicas y morales.
En conferencia de prensa, el vocero de la PGJCDMX, Ulises Lara López, informó que entre las irregularidades del juego se encuentran cintillas de los cinturones de seguridad debilitadas; fugas de aceite en equipo; fisuras en los soportes metálicos con ruedas denominados trucks, los cuales mantenían el vagón circulando por las vías y el riel tenía fisuras.
Para los peritajes, Lara López detalló que se tomaron como elementos de estudio el manual de operación del juego, la lista de inspecciones realizadas por la gerencia de mantenimiento del 31 de agosto al 28 de septiembre de 2019, así como las listas de verificación o check list, de los días 27 y 28 de septiembre del presente año, y el libro de registro de las revisiones de rutina.
El vocero manifestó que los peritajes determinaron que la falta de mantenimiento correctivo y preventivo provocaron que el vagón cinco del tren se desprendiera y provocara la muerte de dos personas y que las otras dos resultaran con lesiones graves, “estamos haciendo la solicitud de audiencia para hacer la imputación directa, por supuesto también a la empresa le fincamos responsabilidades.
“Y en cuanto a los tiempos, es lo que le hemos escrito que está en las hojas de mantenimiento, debieron haber tenido todas las revisiones y no lo hicieron en los días previos y por supuesto el día del accidente”, detalló el funcionario y reveló que La Quimera tenía más de 35 años de operar, por lo que debía recibir mantenimiento permanente.
El funcionario no aclaró cuándo fue la última ocasión que Protección Civil de la alcaldía Miguel Hidalgo realizó una supervisión, al argumentar que en su momento este punto será expuesto a la autoridad judicial.
