metropoli@eluniversal.com.mx
Debido a la exigencia para que se sancione la llamada “corrupción inmobiliaria”, que quedó al descubierto luego del sismo del 19 de septiembre y por la molestia de quienes no han podido volver a sus viviendas que resultaron dañadas, habitantes de la delegación Benito Juárez, personas afectadas por el terremoto y vecinos de otras demarcaciones se manifestaron en la explanada.
En el punto hubo empujones, gritos y reclamos a una comitiva del gobierno delegacional.
“El temblor se pudo sentir más fuerte incluso en otras delegaciones; sin embargo, que aquí se hayan colapsado más edificios no es una casualidad, ya se venía denunciando que había construcciones debilitadas por tener al lado megatorres, megaconstrucciones, a pesar de problemas como falta de agua”, señaló René Rivas, de la organización Movimiento de Unidad y Encuentro Vecinal (Mueve).
En Benito Juárez colapsaron 13 inmuebles debido al terremoto y por lo menos 25 más quedaron con daños severos.
EL UNIVERSAL informó el 26 de septiembre que entre los edificios colapsados había dos que apenas se habían terminado de construir el año pasado en Benito Juárez.
Durante la protesta de ayer, los inconformes, algunos de ellos vecinos supuestamente con viviendas afectadas por el sismo y otros simpatizantes de partidos, como Morena, leyeron un pliego petitorio que incluye la reconstrucción inmediata de las viviendas, transparencia en los recursos utilizados por las autoridades, la investigación exhaustiva de las edificaciones colapsadas, así como la revisión de aquellas que resultaron con severos daños.
Jimena Ugarte, del colectivo Vecinos de Benito Juárez, afectados por el sismo, llamó a emprender diversos recursos legales como amparos y acciones colectivas para resolver la situación de sus inmuebles. Exigió que haya más recursos, porque cuestionó que los hubo para el rescate de los bancos con el Fobaproa. Los manifestantes arremetieron contra la Secretaría de Desarrollo Urbano y Vivienda (Seduvi) por otorgar dictámenes positivos de impacto urbano a las megaconstrucciones y contra el delegado Christian von Roehrich.
Una comitiva de la delegación, encabezada por Federico Chávez, secretario particular del delegado, y de Armando Ramírez, director general jurídico y de gobierno, salió, pero luego de unos minutos un grupo de los inconformes lanzó consignas como”corruptos” y “asesinos” contra estos funcionarios, quienes decidieron volver a la sede.
René Rivas, del movimiento Mueve, comentó que a la manifestación llegaron “muchas organizaciones que no teníamos identificadas”.