Esthela "T"
caminó por la calle Manzanillo, cerca del Metro Chilpancingo , cuando un hombre la atacó sexualmente .
Eran las 18:30 horas en la colonia Roma. La joven de 21 años, estudiante de Arquitectura, traía puesto sus audífonos y caminaba sin preocupación, ya que pensaba que la zona era segura .
Estaba oscureciendo y no había luz en la calle. De pronto, sintió las manos de un hombre que le taparon boca y nariz. No pudo gritar.
El agresor, de aproximadamente 50 años de edad, la sostenía fuerte y logró morderle el labio inferior.
Gritó, logró zafarse y corrió a la zona iluminada más próxima.
Cerca de una tienda de conveniencia y un puestos ambulantes, encontró a dos policías a quienes les pidió auxilio. Ellos continuaron comiendo sus alimentos al tiempo que le aconsejaron que no fuera a denunciar , porque no pasaría nada.
Minutos más tarde, l a joven acudió a atender la herida en su labio, que le costó un par de puntadas .
"Sólo me queda el temor de que recuerdo del agresor, de que, en efecto, me robaron la tranquilidad porque al día de hoy no puedo salir tranquila a la calle sin temerle a todos los hombres que se acercan , que tienen la mano en el bolsillo, que se me quedan viendo, porque no sé si voy a sufrir una agresión otra vez.
"Zoé y yo corrimos con suerte, logramos escapar, pero hay otras mujeres que no corrieron con la suerte de nosotras y que ahora están desaparecidas. Exigimos justicia, queremos que esto se termine", dijo la joven frente a la jefa de Gobierno, Claudia Sheinbaum.
Esthela
exhortó a las autoridades a tomar en cuenta que los ataques suceden en zonas donde las mujeres se sienten seguras, donde "bajan la guardia" . Esto, para construir el modus operandi de los agresores .
Su discurso lo concluyó con la frase: "Ni una más".
etp