En ocho meses de su administración como jefa de Gobierno de la Ciudad de México, Claudia Sheinbaum Pardo, se ha enfrentado a contingencias ambientales, problemas de inseguridad, manifestaciones por violencia contra mujeres y continúa con la reconstrucción del sismo de 2017, situaciones que especialistas consideran que ha logrado librar en beneficio de los capitalinos.
Sin embargo, en el tema de la movilidad ha dado algunos resultados positivos con la puesta en marcha de nuevos medios de transportes amigables con el medio ambiente y modernos, como es el caso de las líneas del Cablebús y nuevas unidades del tranvía, entre otros.
En materia de desarrollo social su apuesta principal ahora son los denominados Pilares, centros de atención y desarrollo en las colonias con mayores índices pobreza y con los que pretende revertir la situación de olvido en la que se encuentras y que son generadoras de la inseguridad.
Apuesta por Movilidad
En los primeros meses de su administración, la jefa de Gobierno ha presentado proyectos para la movilidad de la capital, desde la creación de cuatro líneas de Cablebús, inversión para la modernización del Sistema de Transporte Colectivo (STC) Metro, integración de cámaras de seguridad en unidades de transporte público, así como la construcción de puentes viales que mejorarán la movilidad del oriente de la capital.
Bernardo Navarro, especialista en transporte de la Universidad Autónoma Metropolitana, comentó que lo que va de la gestión ha sido de planeación y propuestas y se espera que pronto den resultados. Las inversiones que se tienen planeadas son benéficas para las personas de más bajos ingresos y que tienen más problemas para movilizarse en la capital.
Aseguró que todavía hay pendientes en el transporte público concesionado como combis, microbuses y camiones, donde no ha logrado una coordinación sobre tarifas y mejorar la calidad de estos medios, pues es necesario, ya que ha habido aumentos en gasolina y refacciones, aunque tiene que haber compromiso de los transportistas.
Al respecto, Martín Manjarrez Betancourt, de la FES Aragón, explicó que es necesario resolver la situación de estos medios de transporte, pues no se puede arriesgar a los concesionarios amarrándoles las manos con una tarifa inferior a sus necesidades, por lo que considera que es el tema que deben trabajar el secretario de Movilidad, Andrés Lajous Loaeza, y la jefa de Gobierno, Claudia Sheinbaum, para resolver lo antes posible esta situación y mejorar el transporte público.
El pendiente de la seguridad
Javier Oliva Posada, especialista en seguridad de la UNAM, consideró que una de las buenas decisiones que ha tomado la jefa de Gobierno de la Ciudad de México es apoyarse en la Guardia Nacional, porque es la primera vez que actúa de manera coordinada la seguridad federal y la local, porque es una forma de reconocer la insuficiencia en los programas de seguridad; pero han hecho falta acciones contundentes para abatir del delito de fuero común, que más lastima a la ciudadanía, a la capital del país.
“No se han desarrollado los programas adecuados para prevenir el robo de vehículos, asalto a mano armada, asalto a transporte público, son 95% de los delitos, entonces sí me parece que han hecho falta esos programas”, dijo.
Jorge Gregorio Vázquez, de la Facultad de Estudios Superiores Aragón de la UNAM, comentó que aún no hay algo contundente en las políticas que han implementado, sobre todo en lo que corresponde a la disminución de delitos de alto y bajo impacto, pues a pesar de la entrada de la Guardia Nacional, aún quedan temas pendientes, entre ellos el del narcomenudeo.
En ese sentido consideró que la participación de la ciudadanía es importante para afrontar este tipo de problemas. “Tienen que haber un mayor involucramiento de la sociedad, para prevenir los puntos delictivos, porque la gente es la que los conoce y los operativos que hace la Guardia Nacional no atienden denuncias vecinales, desconocen la zona porque llevan a cabo estos dispositivos de manera aleatoria e indistinta”, comentó.
Los Pros y Contras
Por primera vez en muchas décadas los gobiernos federal y de la Ciudad de México son del mismo partido, lo que debería considerarse como algo positivo en términos de colaboración política y para la elaboración y el diseño de políticas en pro de la capital.
Gustavo López Montiel, politólogo del Tecnológico de Monterrey, consideró que el apoyo del Presidente es necesario, debido a que Claudia Sheinbaum es una de las principales candidatas a sucederle en el cargo, por lo que no es conveniente que baje su popularidad. “No le conviene que Claudia pierda simpatía, ni que quede fuera de la carrera presidencial, porque tendría que lidiar contra otros actores que ahora se están apoderando de Morena como el grupo que encabeza Monreal o las alianzas que se han comenzado a hacer en torno a Mario Delgado”, aseguró.
Dijo que el único apoyo que ha tenido fue el momento en que se vivió la crisis de seguridad en la capital del país; sin embargo, explicó que el espaldarazo debió habérselo dado en el segundo o tercer año y no en el primero, porque es una estrategia que se desgasta y en la siguiente crisis que ella necesite su apoyo, va a ser mucho más complicado que tenga la misma fuerza política.
En contraparte, Gerson Hernández Mecalco, politólogo de la Facultad de Ciencias Políticas y Sociales de la UNAM, comentó que en este caso ha sido contradictorio, porque en antaño tener un presidente de otro partido abría el debate público.
“La figura del jefe de Gobierno era el contrapeso del presidente de la República, que era de otro partido político, pero por primera vez en el sistema político mexicano, tenemos un presidente y una jefa de Gobierno del mismo partido, eso a su vez pierde la visibilidad en el debate público porque no puede ponerse en contra del Presidente”, comentó.