Más Información
rebeca.jimenez@eluniversal.com.mx
No es con la policía como vamos a erradicar el narcomenudeo o el consumo de alcohol dentro de este campus, es con la reconstrucción del tejido social, dijeron autoridades de la FES Acatlán.
“Si detectamos a algún estudiante alcoholizado o bajo el influjo de alguna droga se atiende su caso, buscamos a sus padres, se le integra a un grupo de terapias y lo invitamos a participar en el programa FES Amigo, así como en actividades deportivas y culturales, aseguran.
Explicaron que buscan reconstituir el tejido social en los casos de adicción al alcohol o a alguna droga; además de que vigilantes y personal universitario acota a todo el que ingiere o vende alcohol o estupefacientes, porque además el reglamento de la UNAM lo prohíbe, precisaron.
La FES Acatlán tiene 22 mil estudiantes, además de 13 mil personas de la comunidad interna y externa que practican alguna de las 18 disciplinas deportivas en los campos y gimnasios de esta Facultad, que permanecen bajo vigilancia.
La participación de los padres de familia es fundamental para evitar que los estudiantes tengan cercanía o consuman alcohol y drogas, comentaron profesores de Acatlán, quienes participan en rondines de vigilancia y detección de conductas o situaciones de riesgo en el interior de este campus de la UNAM.
Víctima, con ligera mejoría. La maestra en Economía Ana Luisa cumple 12 días hospitalizada, luego de que fue baleada cuando salía de la FES Acatlán. Aún se desconoce el paradero de su agresor.
Médicos del hospital privado donde permanece internada la reportan aún grave pero estable, con una ligera mejoría, informaron autoridades académicas de este campus de la UNAM, que se mantienen en contacto permanente con la familia de la maestra en Economía.
Ana Luisa recibió un disparo de bala en la cabeza la noche del 22 de febrero, al salir de la FES.
