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phenelope.aldaz@eluniversal.com.mx
El objetivo era mostrar la fuerza de las áreas de seguridad y procuración de justicia de la Ciudad, pero fue el propio jefe de Gobierno, José Ramón Amieva Gálvez, quien se encargó de mostrar el “músculo” con que se cuenta para combatir a la delincuencia.
Con tan sólo un movimiento certero despojó de un arma de fuego a un capacitador de la Policía de Investigación. No fue necesario quitarse el saco, mucho menos la corbata para refrendar la hazaña.
“A ver si me acuerdo”, ironizó. Y repitió el movimiento. Las sonrisas del procurador de Justicia, Edmundo Garrido, y del titular del Centro de Comando y Control (C5), Idris Rodríguez, no se hicieron esperar.
“Es el primero, viene el cuchillo”, retó; tras colocarse en posición de defensa, logró tirar el arma. Un tercer movimiento, éste con mayor precisión, utilizando las dos manos para someter al atacante y doblarlo hasta casi llevarlo al piso.
Fueron 25 segundos en los que apenas y se desacomodó la corbata; se llevó los aplausos, lo mismo de los mandos que de los aprendices que se encontraban en el Centro de Capacitación y Adiestramiento de la Policía de Investigación. Una escena inédita para un jefe de Gobierno.
Este lunes, el recién nombrado secretario de Seguridad Pública, Raymundo Collins, anunció que atrás quedaría el esquema de cuadrantes, luego de siete años de operación, y se daría paso a una vigilancia más directa y con un mayor patrullaje.
Para ello, desde el hangar del Agrupamiento Cóndores, el jefe de Gobierno anunció ayer que 10 helicópteros se sumarían a los trabajos de patrullaje, realizando sobrevuelos tres veces al día sobre todo en las colonias más conflictivas de la Ciudad.
“Hay zonas que son de difícil acceso como la parte de minas en Iztapalapa, la parte rural en la zona sur; hay otras partes en donde van a estar vigilando el robo de autopartes, estamos hablando por ejemplo de la colonia Del Valle o Polanco. Estarán apoyando operativos especiales como los que se tienen que realizar en algunas vecindades que el acceso es difícil y coordinándose para temas específicos, como es este grupo que se está impulsando y está entrando contra el narcomenudeo”, precisó.
Nuevas patrullas. Un par de horas después se trasladó hasta el Centro de Capacitación y Adiestramiento de la Policía de Investigación, donde además de dar muestra de sus habilidades en defensa personal y desarme, entregó 160 patrullas.
Antes, José Ramón Amieva presenció la simulación de un operativo de rescate de una víctima de secuestro, con todo y francotiradores, drones, granadas y policías encubiertos. Luego presenció una práctica de tiro.
Amieva, quien prefiere caminar por las calles del Centro Histórico bajo un discreto dispositivo de seguridad, ayer dedicó casi tres horas de la mañana para presumir el equipo, personal y tecnología con que cuenta el Gobierno capitalino para erradicar los índices de inseguridad.
Le quedan tan sólo cuatro meses de gestión, pero asegura tener claro su objetivo: “Cuando las personas estén haciendo sus actividades, las hagan de manera tranquila, que puedan salir a un parque, a hacer sus compras, que puedan ir de vacaciones dejando tranquila su casa, que se sientan seguras circulando en la Ciudad, que puedan abordar un transporte público y se sientan seguros. La meta es generar las condiciones y una percepción positiva”.
