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Los protocolos de investigación pericial para casos de feminicidios utilizados por la procuraduría capitalina son laxos, lo que permite que los imputados reciban castigos menores o incluso evadan la justicia, acusó la vicepresidenta de la Comisión de Derechos Humanos de la Asamblea Legislativa, Rebeca Peralta.
Como ejemplo de ello, dijo, están los casos de Lesvy Osorio y de Victoria Salas. En el primer caso la procuraduría local imputó al novio de la joven el delito de homicidio simple doloso, aseguró que Lesvy se suicidó y aunque el acusado presenció el hecho, no hizo nada para evitarlo.
La semana pasada, un magistrado del Tribunal Superior de Justicia local ordenó a la PGJ reclasificar el delito a feminicidio, toda vez que no consideró la violencia de la que fue víctima Lesvy antes de fallecer.
El segundo caso, continuó Peralta, es peor, el novio de Victoria Salas fue visto salir de la habitación del motel donde la joven fue hallada muerta no se pudo se imputar, al momento de su detención, la responsabilidad del hombre y fue puesto en libertad.
Para la legisladora, estos casos simbolizan la falta de coordinación entre los peritos y los Ministerios Públicos de la PGJ para acreditar el tipo penal de feminicidios, y señaló la urgencia para que ambas trabajen de la mano para evitar casos de impunidad.
“Estos dos casos son muestra del actuar de los Ministerios Públicos y peritos. Es indignante que teniendo a los presuntos responsables, los videos que muestran agresiones y su presencia en la escena del crimen, la procuraduría no pueda hacer las imputaciones o hacerlas hasta que los acusados están prófugos”, explicó.
Indicó que los funcionarios que llevan estos casos, donde no se hacen bien las imputaciones, deben ser sustituidos y enviados a capacitación. Se deben revisar las acciones dependientes de la procuraduría para acreditar este tipo penal.
“Para corregir una falla debes reconocerla. Sino, sólo habrá es impunidad e injusticia”, dijo.
