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El juez Édgar Agustín Rodríguez Beiza, del Tribunal Superior de Justicia de la Ciudad de México, responsabilizó directamente al titular de la Procuraduría General de Justicia de la CDMX, Edmundo Garrido Osorio, del atentado que denunció haber sufrido el pasado 22 de marzo.
La Procuraduría General de Justicia de la Ciudad de México respondió que le brindaron la protección, pero cuando lo citaron a que diera su declaración sobre los hechos, el impartidor de justicia se negó a hacerlo.
De acuerdo con el juzgador entrevistado por EL UNIVERSAL, desde el 16 de noviembre de 2017 dio aviso de que era víctima de extorsión por parte de Luis Javier García Vudoyra, padre de Marbella García Ornelas, alumna de derecho que lo acusó en enero pasado de abuso sexual.
En primera instancia, la persona que le llamó para intentar extorsionarlo le pidió 200 mil pesos a cambio de dejarlo con vida y ese mismo día fue interceptado por un sujeto quien le confirmó la veracidad de la amenaza, por lo que acudió a denunciar.
“El 17 de noviembre de 2017 recibí un segundo llamado de extorsión se me dijo que ‘ellos me iban a ir dando las libertades que yo tenía que dictar, de lo contrario, me iban a privar de la vida’; nuevamente lo puse en conocimiento de la Unidad Antisecuestro de la procuraduría”, comentó.
Explicó que a pesar de que presentó una denuncia ante la PGJ y alertó en diversas ocasiones de las amenazas que sufría directamente al titular de la dependencia, las autoridades no hicieron nada para darle protección.
La dependencia capitalina fijó su postura y precisó que “derivado de los actos de investigación realizados por el Ministerio Público, se le proporcionó a la víctima oficio de canalización para que se presentara al área de atención victimal respectiva para brindarle la atención correspondiente. No obstante, la persona no acudió oportunamente, lo que en su momento impidió a esta procuraduría poder valorar la situación de riesgo en que se encontraba”.
En agosto pasado, el Consejo de la Judicatura de la Ciudad de México ordenó suspender al juzgador por tres meses derivado de una investigación por el video que circuló en redes sociales en el que se le observa rompiendo el tapiz de la silla de la sala de audiencias en la que presidiría una diligencia.
Al momento en que recibió las amenazas, Rodríguez Beiza ya se había reincorporado como juez Penal Especializado en el Sistema Oral en la CDMX.
El 22 de marzo, mientras caminaba por calles de la colonia Paraíso, en Iztapalapa, Luis Javier García Vudoyra, el presunto extorsionador, y otro sujeto, se acercaron para amenazarlo y lo hirieron en la clavícula: el domingo el juez fue dado de alta del hospital en el que fue atendido, pero deberá regresar a cirugía por una fractura.
El impartidor de justicia insistió en que las autoridades capitalinas fueron omisas a su demanda de protección y hoy los responsabiliza.
