El jefe de Gobierno, Miguel Ángel Mancera , afirmó que de comprobarse que la pastilla abortiva que se utiliza en las clínicas de la Ciudad de México son de mala calidad, se actuará en consecuencia.
“Cualquier caso donde se compruebe que hay una calidad indebida tendrá que responder el que lo esté realizando”, enfatizó.
En su edición impresa de hoy, EL UNIVERSAL reveló que durante 2016 autoridades sanitarias de la capital analizaron 245 casos de mujeres, de entre 21 y 42 años de edad, que acudieron a las clínicas para interrumpir su embarazo y el proceso médico falló.
Según estudio, realizado por el Instituto de Química de la Universidad Nacional Autónoma de México ( UNAM ) a petición de las afectadas, las pastillas que se usan en las clínicas de la red de salud de la Ciudad de México para provocar el aborto son de baja calidad y no cumplen con los requisitos mínimos para esta práctica.
El documento, emitido en abril del año pasado , concluye que: “La marca comercial Zacafemyl se encuentra dentro de los estándares de calidad reportados, mientras que la Mefaprix no cuenta con los estándares emitidos para su liberación comercial, que involucra sustancias adicionales en alta concentración en la muestra así como impurezas y, lo más sobresaliente, no cumple con el contenido de mifepristona”.
Durante el reporte matutino, se cuestionó al jefe de Gobierno sobre estos casos a lo que respondió: “Desconozco si esto ya está corroborado o no, pero obviamente estaremos en la tarea de corroborar e informar si es que esto así resulta”.
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