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Con la intención de hacer menos pesado el tiempo en reclusión, 10 internos del Reclusorio Preventivo Varonil Sur crearon una banda de jazz y ahora buscan una donación para tener instrumentos propios.
En julio pasado, cuatro de los integrantes participaron en el concurso de la Voz Penitenciaria en Reclusorios de la Ciudad de México, pero no ganaron; después otros seis se unieron para crear una Big Band.
Señalan que fue en prisión cuando aprendieron a tocar cada uno de los instrumentos y ahora se integraron como grupo musical y aseguran que a través de la música logran sobrellevar su estancia en prisión y mejorar su calidad de vida.
Ahora que están juntos los 10 internos, el reto es mejorar su técnica con la ayuda de un maestro que los dirija, pese a que las condiciones son difíciles por la falta de instrumentos, por lo que esperan a que alguien pueda hacer una donación.
Señalan que no pierden la fe y la voluntad de trabajar para lograr un concierto donde puedan interpretar los clásicos de Ray Conniff, Glenn Miller y Benny Goodman, entre otros representantes del género.
Estas actividades forman parte del proceso de reinserción social de las personas privadas de la libertad que implementa el Sistema Penitenciario capitalino, además de que ayudan al desarrollo de hábitos positivos de los internos.
El subsecretario de Sistema Penitencia de la Ciudad, Hazael Ruiz Ortega, explicó que se trabaja en la intensificación de la promoción de actividades artísticas, culturales y deportivas que permitan el desarrollo de cualidades para las personas que están en reclusión.
