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Un mujer es buscada por la procuraduría capitalina por su presunta participación en el ataque en el que fueron asesinados Azulay Alon y Benjamin Sutchi, dentro de la Plaza Artz; según las investigaciones, fue ella quien dio la señal que confirmaba que los israelíes eran el objetivo, para luego escapar por la cocina del restaurante y perderse entre la gente del centro comercial.
En las imágenes captadas por las cámaras de vigilancia del lugar se le observa subir a una camioneta tipo SUV y escapar con otra persona, quien aparentemente coordinó todo el operativo.
Un seguimiento a dicho vehículo concluyó que se fueron hacia el Estado de México y a la fecha no se tiene idea del paradero de ambos; sin embargo, se cuenta con imágenes de sus rostros.
Según la indagatoria, la mujer hizo una reservación en el restaurante donde acordó verse con las víctimas, a nombre de Vanessa Bayer.
Aguardó en el lugar a que llegaran los israelíes, a quienes cuando llegaron los saludó con un beso y abrazo; pidió que los acomodaran en la terraza sin que éstos sospecharan que en la mesa cercana se encontraban sus victimarios (Esperanza “N”, la única detenida hasta el momento, y otro sicario), los que aparentemente sólo esperaron una señal de Vanesa para actuar.
El rostro de la sospechosa fue enviado por la procuraduría capitalina a sus homólogos en todos los estados, al tiempo que hace un rastreo en los sistemas carcelarios del país, así como en la Plataforma México, para tratar de identificar su nombre real y origen.
Trasladan a Esperanza. Luego de que Esperanza “N” fuera llevada a un penal femenil del estado de Morelos, el secretario de Seguridad Ciudadana, Jesús Orta, dijo que esta acción se realizó para no correr riesgos y no porque exista una amenaza en contra de la única detenida por el caso Artz Pedregal.
“El nivel de seguridad con el que se tiene que tratar ese caso es alto. No necesariamente porque exista un riesgo real, sino que este tipo de casos y por donde van las líneas de investigación no podemos escatimar ningún tipo de seguridad”, comentó el jefe de la policía.
La secretaria de Gobierno capitalino, Rosa Icela Rodríguez, precisó que en los penales de la Ciudad no hay la seguridad adecuada para que la imputada permaneciera en el de Santa Martha Acatitla.
En tanto, Orta Martínez explicó que no tienen una alerta por amenaza, sino que el traslado corresponde a una agenda de riesgos.
“Debemos tomar en cuenta todos los escenarios, de acuerdo con lo que hemos estado compartiendo, lo que la investigación ha arrojado y que al final del día a cada instancia involucrada nos toca ejercer alguna acción preventiva para mitigar cualquier escenario”, argumentó el funcionario.
Por su parte, la jefa de Gobierno, Claudia Sheinbaum Pardo, destacó que el traslado de Esperanza “N” se debió a que este tipo de detenidos son considerados de alta peligrosidad; sin embargo, aseguró que el caso sigue en manos de las autoridades de la capital del país.
“En este caso, como en otros de delincuentes que se consideran de alta peligrosidad, es que se hacen estas solicitudes para enviarlos a otros penales o la propia fiscalía solicita a la Ciudad [que lleve a cabo dicho movimiento]”, detalló.