La Secretaría de Finanzas de la Ciudad de México financió con 593 millones 183 mil 208 pesos al Metrobús, de marzo a junio, para pagar la operación de este sistema de transporte, debido a la reducción de usuarios durante la pandemia por Covid-19.
En entrevista con EL UNIVERSAL, Roberto Capuano Tripp, titular del Metrobús, explicó que no se trata de un subsidio, sino que la Secretaría de Finanzas hizo una aportación con el concepto denominado subrogación, el cual se entrega a las empresas concesionarias para pagar la operación del sistema.
“Cargamos las facturas de estas empresas y se paga directamente desde una cuenta pública. Pero no podemos, por ejemplo, desde una cuenta pública pagar lo que le debemos a las empresas de recaudo, porque eso se contrató desde el fideicomiso del Metrobús, que es privado y es ilegal que entre dinero público a un fideicomiso de ese tipo”, detalló.
Destacó que la Secretaría de Finanzas, a cargo de Luz Elena González, tiene un mandato por parte de la jefa de Gobierno, Claudia Sheinbaum, para que el Metrobús no tenga que ofertar menos lugares tras la reducción de usuarios por la emergencia sanitaria.
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Comentó que la última semana normal de usuarios de este medio de transporte fue la del 9 al 13 de marzo, y después de eso el número de usuarios comenzó a caer drásticamente.
“En marzo cayó de un millón 480 mil a 600 mil usuarios; pero desde finales de abril, la caída fue peor, pues sólo se movieron a 320 mil personas y ese número se mantuvo en mayo y junio; a partir de julio comenzó a incrementar y, para el viernes 10 de julio, movimos a 525 mil personas”, dijo.
Capuano Tripp refirió que la semana pasada el número de pasajeros creció a 726 mil personas, es decir, 49% de los usuarios que se registraban antes de la pandemia; no obstante, se ofrece más espacio para que se aplique la sana distancia.
Para sostener el sistema, el Metrobús buscó una reestructuración con sus acreedores y los proveedores de servicios, además se ayudó de forma institucional a estructurar los créditos de los concesionarios, así como algunos servicios como los seguros de las unidades.
“Llegamos a negociaciones con nuestros proveedores de servicios, que son el sistema de la explotación y recaudo, y que tienen los montos más fuertes, aplazamos pagos y hemos estado recuperándonos.
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“Ya las estructuras de los créditos llegaron a su fin y ya estamos normalizando el pago, empezamos a principios de septiembre y ya para octubre estaremos regularizados, salvo en uno, que es un crédito que se reestructuró a 12 meses; los pagos a proveedores ya los estamos regularizando”, declaró.
Ante el crecimiento de usuarios en el último mes, el director del Metrobús comentó que los concesionarios si bien no están viendo el mismo número de kilómetros que estaban cobrando prepandemia, se están recuperando de manera más rápida, en comparación con el resto de los sectores productivos.
Nicolás Vázquez Figueroa, de la Fuerza Amplia de Transportistas (FAT), que representa a concesionarios de la Línea 2 del Metrobús, expuso que pese a los esfuerzos de las autoridades por disminuir las afectaciones con las renegociaciones, principalmente de créditos, la situación todavía es difícil de sostener.
“Aunque en otros medios de transporte ha sido más difícil, a los concesionarios la pandemia nos ha pegado bastante fuerte, estuvimos trabajando sólo con la mitad de nuestro parque vehicular en la época más cruda de contagios, ahora se está estabilizando, pero seguimos con pérdidas por arriba de 30%”, dijo.
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Refirió que, aunque han disminuido los gastos de mantenimiento y combustibles, en términos de personal han tenido problemas, pues reciben 30% menos de su sueldo.
El representante de la Asociación Mexicana de Transporte y Movilidad (AMTM), Jesús Padilla Zenteno, comentó que “con la pandemia, lo único que se observa es que hay un gran riesgo de falta de liquidez y solvencia de las empresas”.