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Colectivos de feministas hicieron un llamado a las autoridades de la Ciudad de México para que pongan énfasis en la creación de políticas públicas contra la violencia hacia las mujeres y que dejen de “criminalizar su movimiento”; además, adelantaron más movilizaciones.
“Estamos [preparando] una movilización mayor para exigir justicia en el caso de Lesvy [Osorio] y en otros (…) No tenemos una fecha”, dijo Kenya Hernández, del Colectivo Zapata Vive, en conferencia de prensa, en las instalaciones de Cencos.
Sin embargo, se reservarán dar información sobre movilizaciones y asambleas, debido a las amenazas que han tenido a través de redes sociales.
Dulce María Lara, de la Red Feminista Políticamente Incorrectas, acusó que tras la manifestación del 16 de agosto, que derivó en diversos actos vandálicos por grupos infiltrados, los ataques aumentaron en internet contra defensoras y activistas que se declaran feministas.
Lara urgió a los gobiernos estatales y a Claudia Sheinbaum, mandataria de la capital del país, a legislar y castigar la violencia contra las mujeres ejercida en el espacio digital, incluso porque el día de las manifestaciones se criminalizaron los actos, generalizando a todas las asistentes.
El pronunciamiento lo suscribieron también Restauradoras con Glitter y Mar Cruz, activista y participante de la marcha, quienes argumentaron que no dejarán de exigir justicia por los cientos de casos de violencia de género y feminicidio.
Sofía Riojas, de Restauradoras con Glitter, reiteró la petición de mantener las pintas en el Ángel de la Independencia hasta que se puedan ver acciones tangibles en contra de la violencia de género en el país.
“No estamos promoviendo la vandalización, creemos que los bienes culturales heredados del pasado son muy importantes, pero pensamos que el foco de la atención se ha estado virtiendo en los daños materiales y lo importante es escuchar lo que nos dicen las pintas”, expresó.
Las feministas y activistas informaron que participarán en todas las mesas del Gobierno de la Ciudad de México para exigir más resultados, incluso que se declare la alerta de género en la capital del país, ante la emergencia que se vive.