La Procuraduría Ambiental y de Ordenamiento Territorial ( PAOT ) presentó una denuncia por la presunta privación de la libertad de cuatro trabajadores que visitaron una vivienda en la alcaldía Iztapalapa en seguimiento a una denuncia ciudadana por maltrato animal.
El 3 de abril pasado, el personal del organismo visitó una vivienda en la colonia Desarrollo Urbano Quetzalcóatl y el propietario del inmueble abordó a los trabajadores en la vía pública.
Los brigadistas explicaron el motivo de la visita, a lo cual el hombre refirió que ya había recibido visitas de la Brigada de Vigilancia Animal de la Secretaría de Seguridad Ciudadana ( BVA-SSC ), por lo que advirtió que era la última vez que permitiría el acceso a su domicilio de manera libre y voluntaria.
Dentro del inmueble los trabajadores de PAOT observaron cinco perros en el patio y azotea , pero también alcanzaron a percibir que salían de la parte superior del inmueble ladridos de varios ejemplares caninos.
Luego de la inspección, el propietario se negó a recibir un citatorio de los servidores públicos para comparecer en las instalaciones de la PAOT. Antes había referido que hace tiempo se dedicaba a criar y vender cachorros en el Bazar de Pericoapa, pero ahora se dedica a reubicar animales .
La situación se salió de control cuando el personal de la procuraduría ambiental cuestionó al hombre sobre el tipo de alojamiento que tenían los animales y su fin zootécnico , es decir si eran animales de compañía o tenían otra utilidad.
El hombre acusó a uno de los servidores públicos de haberle tomado fotografías con su teléfono celular, por lo que le arrebató el aparato y lastimó la mano al servidor público mientras exigía que borraran las foto lastimándole la mano e insultándolo.
Con el apoyo de otras cuatro personas, presuntamente familiares, el hombre puso seguro a la puerta para impedir la salida y solicitó un arma de fuego , además dos brigadistas fueron empujadas contra una pared y recibieron agresiones verbales.
Al final, el personal de la PAOT logró pedir ayuda a través de la línea telefónica 911 y del teléfono de la procuraduría ambiental.
Minutos después llegó personal de la Brigada de Vigilancia Animal de la policía y al escuchar las sirenas de los vehículos de este agrupamiento, el presunto agresor devolvió el teléfono celular, quitó el seguro de la puerta, sin embargo, negó haber retenido y amenazado a los trabajadores.
En la vivienda se ubicaron al menos cinco perros, en el patio había un perro tipo bóxer amarrado y en buena condición corporal; un perro shitzu encerrado en una jaula de 70 por 40 centímetros , además dos perros en la azotea con pelaje sucio y maltratado : un husky y un french poodle con una deformidad en una pata.
El propietario dijo que él mismo atiende y medica a cuatro ejemplares de su propiedad, aunque en el inmueble los trabajadores observaron un perro más de raza chihuahua en apariencia con buena salud.
La PAOT señaló que este miércoles interpuso una denuncia penal ante la Fiscalía Desconcentrada en Iztapalapa , a la cual dará puntual seguimiento.
Añadió en un comunicado que coadyuvará en todo momento con el Ministerio Público en la integración de la carpeta de investigación a fin de que se deslinden responsabilidades en materia de privación de la libertad, robo, resistencia de particulares, ultrajes a la autoridad y lo que resulte en agravio del personal de esta institución.
La PAOT conminó a la población a permitir la labor de sus brigadistas para promover en primera instancia el cumplimiento voluntario de la legislación sobre cuidado animal. El protocolo que deben seguir los trabajadores se puede ver en el siguiente video:
Con información de Gerardo Suárez.