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Aunque fue reabierta la calle de Génova, la Zona Rosa aún padece las obras de mejoramiento y la demolición de un edificio afectado por el sismo. Al momento los comerciantes reportan 40 negocios cerrados, entre bares, restaurantes y hoteles, y pérdidas por más de 100 millones de pesos.
La Agrupación de Comerciantes de la Zona Rosa (Acozoro) denunció que no han recibido apoyos de la Secretaría de Desarrollo Económico. Incluso, invitaron al jefe de Gobierno, Miguel Ángel Mancera, a recorrer las calles antes de que pida licencia a su cargo “para que se dé cuenta del estado de la Zona Rosa”, dijo el presidente de la asociación, Jorge Pascual.
Dijo que está preocupado por la lentitud de los trabajos de demolición de Génova 33, así como del inmueble ubicado en Hamburgo 112, donde no han comenzado dichos labores: “Nos preocupa el cierre de negocios. Nos preocupa que digan que van a tardar hasta seis meses para tirarlo [Génova 33]. La secretaria de Gobierno, Patricia Mercado, prometió que los trabajadores no iban a descansar durante diciembre. Nosotros vamos a estar atentos de que así sea”.
Además denunciaron que se sienten hostigados por las instituciones que se dedican a verificar los negocios. Pusieron como ejemplo el caso del restaurante-bar La Chelestial, que ha sido objeto de cuatro verificaciones en las últimas semanas (dos a cargo del Invea, una realizada por Medio Ambiente y otra por Salud).
“No nos han cerrado porque tenemos todos los papeles. Pero es un procedimiento largo, tedioso y caro. Por ejemplo, Medio Ambiente exige trámites de hasta 20 mil pesos para análisis de agua y sonido, este procedimiento lo tenemos pero no nos han dado el documento oficial”, expuso.
