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De 2010 a 2014, el Colegio Enrique Rébsamen creció en su matrícula de alumnos y espacio, presuntamente bajo la corrupción de las autoridades en turno de la delegación Tlalpan.
Actualmente la procuraduría local investiga si la directora o el representante legal de la escuela encontraron la manera de corromper a funcionarios.
En 2010 la Gaceta Oficial del Distrito Federal, en el índice “Decreto que contiene el programa delegacional de Desarrollo Urbano para la delegación Tlalpan del Distrito Federal”, destaca que en las colonias de la zona conocida como Villa Coapa “no se autorizarán nuevas instalaciones o ampliaciones dedicadas a la educación privada, tales como guardería, jardines de niños, primaria, secundaria, preparatorias” y en general todas las escuelas, salvo que la Norma de Ordenación sobre vialidad lo permita.
En este mismo apartado de la Tabla 50 del Programa de Desarrollo Urbano, destaca que la zonficación de todo el sector antes mencionado, que incluyen las colonias Fraccionamiento Prados Coapa secciones 2 y 3, Plaza Coapa, U.H. Narciso Contreras, SM 2, 3, 4, 5, y 6, así como del fraccionamiento Villa Coapa, precisamente las que resultaron más afectadas con el sismo del 19-S, se limita a uso habitacional.
Sin embargo, de 2010 a la fecha en los alrededores las escuelas privadas, los bares, restaurantes y antros crecieron, lo que a decir de habitantes de la zona se debió a la corrupción que impera en la delegación desde administraciones pasadas, donde a pesar de las reglas establecidas se construyeron un sinnúmero de edificios.
“En esta zona no se pueden construir grandes edificios por el tipo de suelo, ve lo que pasó en la plaza de Villa Coapa, eso ya no sirve. Y desde ahora también advertimos que la construcción de Gran Terraza Coapa, del predio Acoxpa 610, es irregular y un riesgo, ya se lo demostramos a Sheinbaum y nos insultó por eso, no hizo nada y dijo que ‘es modernizar todo el sector’”, comentó Patricia Hernández, vecina de la zona.
Con la tragedia del Rébsamen, quienes han hecho públicas todas estas presuntas irregularidades esperan que las autoridades tomen prevenciones, pero además revisen y regularicen todos los predios, escuelas y construcciones del sector, para evitar una situación similar a la que dejó 18 niños y ocho adultos muertos.