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El gobierno federal propuso asignar en 2018 a la Ciudad de México mil 250 millones de pesos para el Fondo de Capitalidad, monto menor a los 2 mil 450 millones de este año, situación que es “incongruente” e “inentendible”, señaló Andrés Atayde, presidente de la Comisión de Hacienda en la Asamblea Legislativa.
Luego de que se diera a conocer la semana pasada el Proyecto de Presupuesto de Egresos 2018, elaborado por la Secretaría de Hacienda y Crédito Público que encabeza José Antonio Meade, el panista cuestionó la idea de reducir a la mitad el fondo.
“Pese a las declaraciones del titular de Hacienda de que la propuesta de Paquete Económico será responsable y sin cambios en impuestos y con ajustes al gasto público, resulta incongruente ahora con el recorte”, dijo.
Añadió que la necesidad de recursos de la capital del país ahora es más importante; sin embargo, las cifras se dan a conocer durante una semana en la que la ciudad incluso fue afectada de manera severa por desastres naturales, por ejemplo, las inundaciones en el sur que han dejado más de 2 mil viviendas afectadas.
Este es el segundo año en que el gobierno federal propone un presupuesto a la baja para el Fondo de Capitalidad, recursos que el gobierno de la Ciudad de México emplea para hacer obras que mejoren la movilidad, el transporte, el espacio público, entre otros aspectos.
El año pasado con la primera reducción se desató una polémica entre el jefe de Gobierno Miguel Ángel Mancera con el secretario de Hacienda, pues tampoco se destinarían recursos para la ampliación de la Línea 12, línea 9 ni línea A del Metro.
Andrés Atayde explicó que dicho fondo fue de 3 mil millones de pesos en 2014; 3 mil 500 millones en 2015, luego 4 mil millones en 2016, sin embargo en 2017 cayó a 2 mil 450 millones, cuando se pronosticaba mantener la tendencia y recibir, al menos, cuatro mil 500 millones.
“El año anterior decíamos que el secretario acababa de tomar el puesto,, pero este año no tiene esa excusa”, agregó.
Hace un año, el Fondo de Capitalidad ni siquiera había sido incluido en el Proyecto del Presupuesto de Egresos de 2017 que se envió a la Cámara de Diputados, por lo que el gobierno capitalino tuvo que presionar y negociar. Atayde Rubiolo dijo que el gasto corriente debe ser reducido en todos los niveles de gobierno, pero señaló que “recortes tan sensibles como los que se plantean en materia de salud y desarrollo social, con 4.5% y 3.4% respectivamente, ponen en riesgo la congruencia del proyecto”.