El Congreso de la Ciudad de México está obligado a transparentar todos los gastos que se generen, incluso las prerrogativas que son utilizadas para la gestión social de cada diputado, comentó la comisionada ciudadana del Instituto de Transparencia, Acceso a la Información Pública, Protección de Datos Personales y Rendición de Cuentas de la Ciudad de México (Info), María del Carmen Nava Polina.
En entrevista con EL UNIVERSAL, la comisionada de transparencia explicó que lo anterior se debe a que son sujetos obligados, además de que por ley, tanto federal como local, deben informar sobre el presupuesto que utilizan.
Asimismo, la funcionaria destacó que la transparencia siempre estará de la mano con el fortalecimiento y la confianza de la representación legislativa.
“Si nos remontamos a la constitución federal, [ahí se] establece [que debe haber] transparencia y, como parámetro principal, que todos los sujetos obligados sean los que utilizan recursos públicos o tomen decisiones públicas.
“Entonces el origen constitucional de la obligatoriedad de transparentar los recursos que se utilicen es sí o sí. Además tienen que cumplir con los parámetros de fiscalización”, agregó.
Nava Polina recordó que en la Constitución de la Ciudad de México también se encuentra establecido que el Congreso local puede ser un parlamento abierto y operar sobre ejes constitucionales de apertura, disposiciones que son características sólo en la capital del país.
“Por distintas aristas, los legisladores están a merced, obligados a dar muestra de que son transparentes y a rendir cuentas de manera permanente, tanto de los recursos humanos como los materiales.
“Si los sumamos con los informes administrativos del uso de recurso, es ahí donde tiene que solventarse en qué se utilizaron los recursos”, detalló.
Pese a que los diputados comentan que estos recursos no son para ellos, sino para asesores y trabajo territorial, entre otras cosas, la comisionada comentó que el Congreso local debe tener lineamientos y manuales de operación del uso de estos recursos, y, sobre todo, disposiciones de cómo comprobar el uso de estos recursos.
“Es una obligación constitucional que marca la Ciudad, entonces debe haber nitidez en esos recursos, que éstos sean transparentes, que su uso se coteje con los resultados. Éstos son los parámetros que establece la Constitución de la Ciudad de México”, dijo.
Asimismo, Nava Polina consideró que el reto para el Congreso es la creación de lineamientos de aplicación de recursos y de su uso, a fin de tener una certeza de cómo comprobarlos, en qué sí utilizarlos, en qué no y cómo clasificar el tipo de gestión que se realiza.
“Ya que se ubicó un diagnostico, que se tienen miras a comprobar el uso de recursos, el ideal sería que tuvieran sus propios lineamientos”, expuso la comisionada de transparencia.