En medio de invasiones a su alrededor y al crecimiento urbano irregular que se presenta tanto del lado del Estado de México como de la Ciudad de México, la Sierra de Guadalupe está en un proceso de rehabilitación socio-ambiental para que los ciudadanos aprendan a cuidar una de las reservas ecológicas más importantes de la capital.
Detalla que la sierra y cadena montañosa tiene una extensión de 6 mil 323 hectáreas, el pico con mayor altitud corresponde al Picacho de Moctezuma, con 3 mil 55 metros sobre el nivel del mar; le siguen el cerro El Fraile, El Jaral y otras montañas importantes como Zacatenco y El Chiquihuite, las cuales forman parte de la intervención.
Hasta el momento, se han rehabilitado casetas de acceso, estacionamiento, gimnasio, mirador y se han colocado juegos infantiles en algunas zonas que eran usadas como tiraderos clandestinos o habían sido olvidadas; en la primera etapa se prevé el diálogo con vecinos para informar la importancia del área natural protegida.
“La primera etapa es que, en sitios específicos, les creemos condiciones para que se puedan ser visitados, no sólo con infraestructura, sino con un programa social, ambiental y cultural, incluso para la conservación [de la sierra]. El trabajo va enfocado para que jóvenes y niños se integren a los espacios que se rehabilitan”, reitera Obregón Viloria.
“El área está sujeta a muchas cuestiones, por ejemplo, vandalismo, porque muchos de los incendios que tenemos aquí son provocados por travesuras, prácticamente. Entonces, buscamos que haya convivencia para que la gente aprenda y se vincule hacia la parte natural y sepa que esa no se debe tocar”, externa el funcionario.
El director general del Sistema de Área Naturales Protegidas y Áreas de Valor Ambiental explica que a diferencia del Parque Nacional El Tepeyac, la Sierra de Guadalupe ha tenido apoyo forestal de municipios como Coacalco, Ecatepec y Tlalnepantla, que se ha enfocado principalmente al cuidado de la zona de conservación incluso que la Ciudad de México tienen un consejo asesor para evaluar las acciones en conjunto.
“Llevamos cerca de un año cuando empezamos, y en los próximos cinco años esperamos que tengamos avances sustanciales en esa meta, que es conservar la integridad del ecosistema en la Sierra de Guadalupe y en esa medida vamos a ir avanzando en la etapas”, externa Rafael Obregón.
Durante el recorrido de EL UNIVERSAL se observa que la Sierra de Guadalupe tiene un ecosistema xerófilo o llamado bosque seco, en el cual abundan especies espinosas como cactus, nopaleras, encinos y árboles de copal.
También diversas especies de serpientes, águilas, además hay avistamientos de la zorra gris, que para los especialistas es una buena oportunidad de conservar más la zona ya que demuestra que hay una cadena alimenticia.
La zona se encuentra abierta al público y se pueden observar a corredores y ciclistas; sin embargo, muchos de los vecinos desconocen la zona, incluso que pueden acceder a ella ya que hasta el momento no hay señalética, pero se prevé que también sea colocada.
En ese sentido, el líder de la Coordinación de Proyectos del Área Natural Protegida de la Secretaría de Medio Ambiente, Leonardo Barragán Guerrero, dice que muchos lugares de las zonas que están interviniendo desde años anteriores estaban en el abandono y lo que buscan con el proyecto es que también haya seguridad.
“En estos momentos están poniendo juegos, acondicionando áreas para un mejor disfrute de la población, en un inicio, para acercarla, y que poco a poco podamos absorberla para darles el conocimiento sobre esta zona”, dice.
Los lugares que se encuentran intervenidos hasta el momento son el cerro de Vicente Guerrero y en las cercanías del Barrio de Cuautepec, en la que se han colocado aparatos de ejercicio.
Cabe mencionar que la Secretaría del Medio Ambiente de la Ciudad de México, con una inversión de 125 millones de pesos, incluyendo a la Sierra de Guadalupe, se encuentra renovando, de manera similar, la Sierra de Santa Catarina y el Cerro de la Estrella (ambos en Iztapalapa) y el Parque Ecológico de la Ciudad de México, en Tlalpan.
Con la limpieza de la hierba o ramas secas, los encargado de la Sierra de Guadalupe se preparan para combatir la temporada de incendios que comenzará antes que concluya diciembre y esperan tener menos de 30 siniestros, cantidad que tuvieron este año.
“Tenemos varias brigadas trabajando en el tema de incendios ya que el ecosistema se seca muy rápido y es como poner combustible. En unas semanas comenzará la temporada de incendios; sin embargo, ya tenemos muchas acciones realizadas que empiezan con el chaponeo, que es quitar la hierba seca, para los incendios igual nos estamos coordinando con el estado de México”, concluye el director general del Sistema de Área Naturales Protegidas.