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Con el objetivo de mantener el orden y el control en los 13 centros de reclusión de Sistema Penitenciario capitalino, dependencias de seguridad han realizado 12 mil 208 revisiones y operativos en nueve cárceles locales, consideradas las más peligrosas, desde las cuales se siguen ordenando secuestros y extorsiones.
Gracias a estos trabajos se han decomisado 2 mil pastillas sicotrópicas; siete kilos 744 gramos de marihuana; 217 grapas y un envoltorio de cocaína; 286 litros de solvente; mil 268 puntas y 452 navajas.
Asimismo, se informó que para esta temporada decembrina se reforzará la vigilancia, las estadísticas demuestran que en esas fechas los reos intentan meter más droga.
También se decomisaron mil 261 prendas prohibidas; mil 998 litros de fruta fermentada; 93 litros de licor y 14 de cerveza; 944 teléfonos celulares; 306 chips; mil 422 objetos para agredir como palos, vidrios, trozos de lámina; 103 dispositivos eléctricos, armas de fuego y un cartuchos.
A pesar de los beneficios que la implementación de la nueva reforma penal ha traído al Sistema Penitenciario, actualmente hay 28 mil 41 internos, algunos de alta peligrosidad recluidos en el “Diamante”, mientras que otros penales están repletos, en su mayoría, por ladrones reincidentes que sólo pasan meses tras las rejas.
Sin embargo, estos esfuerzos parecen inútiles ya que hasta el pasado 30 de octubre la procuraduría capitalina registró, en los centros de reclusión, cinco homicidios dolosos, donde aparentemente la lucha por el poder o “diferencias personales” fue el detonante para que se mataran.
Según estas cifras, tres ejecuciones tuvieron lugar en el Reclusorio Oriente, otro en el penal femenil de Santa Martha y uno más, en el Centro de Reinserción Social Varonil de Santa Martha, aunque este año la autoridad sólo tuvo conocimiento de dos conatos de bronca y ningún motín, los encargados del penal anunciaron que se continuará con el trabajo, que hasta ahora ha dado resultados.