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Un total de 24 aserraderos clandestinos fueron detectados durante un operativo en la zona boscosa de San Miguel y Santo Tomás Ajusco, en la alcaldía Tlalpan, los cuales serán clausurados y desmantelados, informó la jefa de Gobierno, Claudia Sheinbaum Pardo.
Desde las 5:00 horas de ayer se desplegó un operativo contra la tala clandestina, conformado por más de mil 300 servidores públicos locales y federales, incluidos 70 elementos del Ejército y 360 de la Gendarmería, apoyados con un helicóptero Black Hawk, así como 550 policías de la Ciudad, entre otros.
“En algunos casos, [los aserraderos] estaban cerca de la carretera, a un kilómetro de la carretera, haciendo estas actividades; entonces, en parte lo que se detecta son claros que antes no había en el bosque, producto de la tala clandestina (…). El objetivo es clausurar todos estos aserraderos clandestinos”, mencionó la mandataria capitalina.
Descartó que haya grupos de la delincuencia organizada involucrados en estos centros ilegales de almacenamiento y transformación de madera, pero comentó que se ha detectado que hay personas de otras entidades que estarían relacionadas con la tala clandestina.
“En algunos casos son comuneros, pero ha habido un incremento de grupos de taladores que no vienen de la Ciudad, que están entrando por Morelos o por el Estado de México, entonces también por eso están participando las fuerzas federales y además porque la tala clandestina en zonas forestales es un delito federal”, explicó la exsecretaria de Medio Ambiente capitalino.
Sheinbaum Pardo agregó que los operativos en conjunto con el gobierno de la República seguirán en la comunidad de Topilejo, también en Tlalpan, así como en las comunidades agrarias que se ubican en la alcaldía Milpa Alta.
Acompañada por la secretaria de Medio Ambiente, Marina Robles, y el coordinador de gabinete de seguridad, Tomás Pliego, la mandataria mencionó que este año se invertirán mil millones de pesos en la mejora del suelo de conservación.
Detalló que uno de los planes es que los propietarios de esas tierras conformen brigadas y reciban dinero para proteger los bosques, evitar incendios y la tala clandestina.
