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La madrugada de ayer fueron asesinadas a balazos dos personas sobre Paseo de Reforma, frente a la Estela de Luz, sin que hasta el momento las autoridades tengan indicios de los presuntos responsables, a pesar de que en la zona hay más de 20 cámaras de vigilancia del C5 de la Secretaría de Seguridad Ciudadana (SSC) de la capital del país y de que existe un patrullaje constante en el lugar.
De acuerdo con el reporte oficial de la Procuraduría General de Justicia (PGJ) de la Ciudad, el ataque se registró alrededor de las 2:30 horas del miércoles, cuando las víctimas viajaban a bordo de un vehículo Jetta rojo, de la marca Volkswagen, con placas de circulación G66AEN. Los asesinos les dispararon desde un automóvil con cromática de taxi.
En la escena del crimen se encontraron 16 casquillos de dos armas distintas de calibre 9 milímetros.
Su acompañante aparentemente intentó escapar, pero sólo logró caminar algunos metros y quedó tendido junto al vehículo. El hombre fue llevado con vida a la Cruz Roja de Polanco, pero más tarde se dio a conocer que también murió.
De acuerdo con los peritajes realizados, cada uno tenía seis impactos de bala en tórax y rostro.
Se informó que a pesar que las cámaras del C5 aparentemente lograron captar el momento del ataque, la intervención y reacción de los operadores fue tardía, pues reportaron la agresión hasta 10 minutos después, para cuando los elementos de la policía capitalina llegaron al lugar los responsables habían huído.
Ante esta situación, elementos de la Policía de Investigación (PDI) pertenecientes a la procuraduría local solicitaron el acceso a las cámaras colocadas sobre Reforma y arterias aledañas, para analizar los momentos previos y posteriores a lo sucedido.
Con base en la información a la que han tenido acceso, lograron determinar que los atacantes venían siguiendo a las víctimas, aparentemente, desde la zona de Polanco.
Una vez que disminuyeron su velocidad, luego de ingresar a Paseo de la Reforma, el vehículo donde viajaban los agresores se les emparejó y accionaron las armas de fuego. Éste logró perderse luego de atravesar a gran velocidad la arteria hasta llegar al cruce con avenida Insurgentes.
Aún se encuentran analizando la imágenes de las cámaras del C5 de la zona de los hechos para tratar de ubicar la ruta de escape.
Con base en lo asentado en la carpeta de investigación FCH//CUH-1/ UI-1C/D/0613/03-2019, que la procuraduría local inició por este doble homicidio, las indagatorias apuntan a que el hecho esta relacionado con un ajuste de cuentas por la venta de drogas al menudeo. Las víctimas aparentemente distribuían enervantes en Polanco, la Zona Rosa y en el corredor Roma-Condesa.
El Jetta rojo con placas G66AEN era investigado desde diciembre pasado, luego de que fue señalado por dueños de antros como uno de los que utilizaban los cobradores de cuota de La Unión Tepito y, además, aseguran que en él llegaba a surtir drogas en el área restaurantera y de bares nocturnos en las llamadas zonas doradas.
Matan a seis. En las últimas 36 horas, otras seis personas fueron asesinadas con características de ejecución en diversas alcaldías. En dos casos, los cuerpos de las víctimas aparecieron embolsados y con huellas de tortura; las autoridades imputan estos crímenes a la disputa de grupos criminales por la venta de drogas.
La procuraduría capitalina dio a conocer que las fiscalías de Gustavo A. Madero y Álvaro Obregón iniciaron investigaciones por cuatro muertes. En la primera demarcación, el lunes encontraron los cuerpos de un hombre y una mujer descuartizados y, en la segunda, el martes hallaron dos embolsados que, según los peritajes, fueron torturados hasta la muerte.
En Iztapalapa, las autoridades tuvieron conocimiento de otra doble ejecución en el sector de Culhuacán, donde las víctimas eran jóvenes de entre 20 y 25 años, quienes a decir del peritaje recibieron 10 impactos de bala de arma de grueso calibre. Ese sector es disputado entre dos grupos de narcomenudistas identificados como Los Rodolfos y Los Molina.