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david.fuentes@eluniversal.com.mx
A tres meses de que se perpetró uno de los ataques más violentos en la Plaza Garibaldi, la Procuraduría General de Justicia de la Ciudad de México (PGJ-CDMX) no tiene avances significativos al respecto, de hecho, ni si quiera han establecido el móvil de la agresión que dejó como saldo seis muertos y seis personas más heridas.
La dependencia investigadora, hasta el momento, ha logrado la detención de un presunto sospechoso y quien, aseguran, participó en el ataque en Garibaldi disfrazado de mariachi, fue identificado como Fernando “N”, alias La Rata, y quien actualmente permanece en prisión y vinculado a proceso a penal.
Sin embargo, el imputado no ha revelado detalles al respecto y su defensa busca demostrar que el día de los hechos, La Rata no estuvo en el lugar, y que incluso las fotografías y los videos presentados por la procuraduría capitalina, para imputarle su participación en la masacre, no corresponden a él.
El abogado de oficio que lleva la defensa pidió realizar una serie de exámenes de fisonomía que buscan demostrar que las imágenes con las que cuenta la PGJ-CDMX no concuerdan con los de La Rata, pues ademas de eso sólo tienen el testimonio de un indigente, quien asegura lo vio vestido de mariachi minutos antes de la agresión.
Sin confirmar versión. Aunque ha trascendido que el móvil del ataque era asesinar a Jorge Flores Conchas, El Tortas, líder del grupo autodenominado La Anti-Unión de Tepito, la procuraduría capitalina aún no confirma que la agresión haya sido por eso.
Las pruebas recabadas de testimonios de los sobrevivientes refieren que El Tortas no estaba en el lugar durante el ataque. De igual manera, no han encontrado pruebas fehacientes de que El Huguito, jefe de sicarios de La Unión de Tepito, haya organizado el atentado en la chelería que, según las investigaciones, era el centro neurálgico para le venta de drogas del clan de El Tortas.
Al respecto, los agentes que llevan el caso, sólo han confirmado que “los mariachis asesinos” salieron de una vecindad de la calle Paraguay en la zona centro; sin embargo, en los interrogatorios practicados a los moradores de ese lugar, nadie ha confesado información importante.
