Hasta un mes han tenido que esperar las personas que perdieron a un familiar por Covid-19 para obtener un acta de defunción en las diferentes sedes del Registro Civil, comentan afectados.
Aseguran que han deambulado durante días para conseguirlo. En todos los casos, afirman, los trabajadores les argumentan que no hay papel para imprimirlas, no hay sistema o personal para atender a todos.
Elizabeth Almazán pasó casi un mes —desde que murió su esposo por Covid-19 el pasado 26 de diciembre— esperando que el Juzgado 51 del Registro Civil de la Consejería Jurídica de la Ciudad de México le diera el acta de defunción, para poder cobrar el dinero que dejó su marido.
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Desde el día en el que falleció su cónyuge, la mujer deambuló, primero por el Juzgado 51, luego el 14, después el 18, y al final por Arcos de Belén.
Aunque los trabajadores sabían que dichas instalaciones permanecen cerradas, la seguían enviando a realizar el trámite en otras oficinas.
“Por fin [me dan el acta], a casi un mes de que murió mi esposo [por Covid-19]”, dice Elizabeth mientras sale del juzgado.
Previo a que le dieran su documento, cuenta a EL UNIVERSAL que: “Regresé aquí [al Juzgado 51] y me dicen que no tienen personal, que no hay sistema y que no pueden hacer nada.
“Simplemente te dicen: ‘No hay, no hay y no hay’, y yo vengo desde muy lejos, Tlalnepantla.
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“Ya he venido cuatro veces, con esta cinco, llevo dos semanas peregrinando. Hasta hace ocho días me dijeron que viniera el 15, y ahorita que llegué me dicen que van a ver si salen porque no tienen sistema otra vez”.
En el juzgado se acumulan las personas. Afuera, en una cartulina pegada sobre los cristales, hay un mensaje: si hay quejas acudir con la encargada.
César García vio luchar durante ocho días a dos de sus familiares, quienes murieron el 20 de diciembre por Covid-19.
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Al día siguiente de los decesos inició los trámites, pero los crematorios llenos generaron que los cuerpos quedaran bajo resguardo dos días, y no fue hasta ayer que las autoridades le expidieron las actas de defunción.
“Fíjate en qué fecha estamos, casi 20 días [han pasado]. Me decían: ‘Fórmate, sale mañana tu documento, no hay sistema’. Es algo bien absurdo. También hay que comprender que puede ser entendible, pero toda esta documentación es esencial, deberían poner más personal”, pide.