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Elementos de la Secretaría de Seguridad Pública (SSP) detuvieron a dos de los presuntos homicidas que participaron en una balacera en una taquería en la colonia Obrera, alcaldía de Cuauhtémoc, el sábado por la noche, donde cinco personas resultaron heridas y una murió.
Al momento de su detención, los delincuentes tenían una de las armas que utilizaron ese día, una .38 especial con varios casquillos percutidos.
Policías en coordinación con las cámaras de seguridad del C-2 Centro localizaron a dos hombres que viajaban en una motocicleta Italika, negro con rojo, quienes coincidían con el perfil de los agresores, señalado por testigos de los hechos.
Conforme al protocolo de actuación policial, se les realizó una inspección de seguridad a los presuntos responsables de 20 y 22 años, respectivamente. Los afectados identificaron plenamente a los detenidos como los responsables de las detonaciones, por lo que ambos fueron puestos a disposición de la Agencia del Ministerio Público CUH-2, donde se inició la carpeta de investigación correspondiente.
A decir de la policía preventiva, una vez que fueron alertados del ataque armado, inició una búsqueda por calles de la colonia Obrera.
De inmediato acudieron al lugar de los hechos y se entrevistaron con algunos testigos, quienes refirieron que un hombre sin mediar palabra empezó a disparar sin dirección fija, y tras herir a varios comensales, se dio a la fuga a bordo de una motocicleta junto con otro hombre.
Paramédicos de una ambulancia del Servicio de Atención Médica de Urgencia (SAMU) atendieron en el lugar a un hombre de 52 años de edad lesionado por proyectil de arma de fuego en el lado derecho de la cintura y a otro hombre por un disparo en la pierna derecha.
Dos mujeres de 57 y 19 años, respectivamente, tenían un impacto en la pierna izquierda y una herida en la pierna derecha; las cuatro personas lesionadas fueron trasladadas al hospital General de Balbuena.
Asimismo, una mujer de 53 años resultó herida de bala en el pecho del lado izquierdo, por lo que fue trasladada al hospital Roma Médica.
Al exterior del negocio se encontraba el cadáver de un hombre de 34 años, trabajador de la taquería, con dos impactos en el abdomen. Varios de los testigos proporcionaron datos importantes que derivaron en la detención de los sujetos.
Las primeras investigaciones apuntan a que el atentado contra la taquería está relacionado con la extorsión y el “cobro de piso” que grupos criminales asentados en el primer cuadro de la Ciudad han implementado contra los comercios.
Los empleados refirieron a las autoridades que en diversas ocasiones jóvenes armados que se identificaban como de La Unión, llegaron al lugar a exigir 10 mil pesos mensuales para evitar “dañar” a sus clientes. El cobro aumentó ahora que El Betito y El Pistache fueron detenidos, dijeron a autoridades.
Los encargados de la taquería se negaron y en represalia, aparentemente los jóvenes dispararon contra los clientes y empleados.