metropoli@eluniversal.com.mx

A través del fraude conocido como “La patrona”, en el que delincuentes llaman por teléfono a empleados para hacer creer que su patrón o patrona tiene una emergencia, dos elementos de la Policía Auxiliar fueron detenidos y presentados al Ministerio Público de la procuraduría capitalina por ingresar a la fuerza a la oficina de la procuradora social de la Ciudad, Patricia Ruiz Anchondo.

De acuerdo con la carpeta CI-FCH/CUH-7/UI-3S/D/05821/10-2-019, los elementos identificados como Florentino “N” y Santos “N”, quienes laboran en el resguardo de la sede de la Procuraduría Social de la Ciudad de México (Prosoc), en la colonia Roma, recibieron una llamada telefónica en donde una mujer se hizo pasar por la funcionaria y les ordenó que se trasladarán a su oficina a buscar un sobre con dinero.

La mujer le pidió a Florentino “N” que no colgara la llamada telefónica para que les diera instrucciones para la búsqueda de dicho dinero, toda vez que lo necesitaba “entregar” si no tendría que pagar una multa de 33 mil pesos, según se puede leer en la carpeta.

Una vez que los uniformados se trasladaron a la oficina, la mujer les pidió que si era necesario rompieran la puerta, acción que realizaron los policías, quienes comenzaron a forzar la cerradura.

Luego de que lograran abrirla, las víctimas pidieron más especificaciones de dónde podrían encontrarse dicho sobre, toda vez que en el escritorio de la funcionaria no estaba. Ambos revisaron los cajones sin obtener resultado, por lo que la mujer, quien ya comenzaba a impacientarse, les refirió que mejor buscaran dinero por toda la oficina.

Florentino y Santos revisaron toda la oficina y bajo las instrucciones que les daba, subieron al tercer piso del edificio de la Prosoc, y en el área de la Subdirección de Finanzas volvieron a forzar la puerta, esta vez sin éxito.

“Sólo le ocasionaron daños a la puerta y después de esta acción optaron por colgar el teléfono y comunicaron lo sucedido a su superior”, se puede leer en la narración de hechos asentada en el expediente.

Los efectivos narraron lo sucedido a su supervisor, desde el registro de la llamada hasta las instrucciones que la defraudadora les dictaba, por lo que supervisor de los policías víctimas de este fraude les pidió que no se movieran del lugar y que lo esperaran ahí.

Sin embargo, sólo les pidió que permanecieran en una de las oficinas para que posteriormente fueran trasladados a la agencia del Ministerio Público de la Fiscalía Desconcentrada en Cuauhtémoc 7.

Hasta allá se trasladó la coordinadora general jurídica de la Prosoc, María del Carmen Ojesto Martínez Porcayo, quien levantó la denuncia de hechos en representación de la procuradora social y refirió al Ministerio Público que la misma Ruiz Anchondo realizaría una inspección en su oficina para ver si había algún faltante, información que fue proporcionada a la procuraduría capitalina y al jefe general de la Policía de Investigación (PDI), Francisco Almazán Barocio.

Este no es el primer caso de fraude que se ha intentado en una dependencia capitalina, pues la procuraduría local tiene registro de un caso similar, pero en contra de dos elementos de la PDI, a quienes a través del mismo modus operandi, una llamada telefónica, se les encaminó a romper la puerta de la oficina del entonces jefe general, Omar García Harfuch.

Google News

TEMAS RELACIONADOS

Noticias según tus intereses