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Valle de Chalco, Méx.— El homicidio de Camila, de nueve años, ocurrido la noche del 31 de diciembre en la colonia Poder Popular Francisco Villa, además de provocar pesar entre los habitantes de esa comunidad, generó que los vecinos se volcaran en la búsqueda del presunto asesino, por su supuesta presencia en el funeral, lo que fue calificado por las autoridades como una sicosis colectiva.
Decenas de elementos de las policías municipal y estatal, así como militares, se desplazaron hacia esa comunidad irregular ubicada en el Cerro del Marquez, para localizar al presunto asesino de la menor, luego de que se esparció el rumor de que lo vieron cerca de donde la violó y mató.
Después de más de tres horas de búsqueda de cientos de vecinos, familiares, amigos y miembros de las corporaciones de los tres niveles de gobierno, el alcalde morenista de Valle de Chalco, Francisco Tenorio, declaró que no existieron indicios de que el asesino hubiera sido localizado y que sólo se generó “una sicosis social armada de manera irresponsable por algunos ciudadanos”.
Mientras el cortejo fúnebre se dirigía hacia el panteón municipal de Xico, se esparció la versión de que el asesino de la niña había sido visto por uno de los vecinos del lugar, lo que ocasionó una movilización social y policial para arrestarlo.
Por varias calles de la colonia y del fraccionamiento ARA, contiguo a donde ocurrió el crimen, cientos de habitantes lo buscaron, porque aseguraron que habían detectado su presencia por la zona.
A esa búsqueda se sumaron las corporaciones de los tres niveles de gobierno, pero sin resultado. Las autoridades, incluso, dijeron que solicitarían al ayuntamiento de Nezahualcóyotl el helicóptero Coyote 1 para que los ayudara a buscarlo vía aérea.
La mañana del miércoles pasado, amigos, compañeros de escuela y familiares de Camila estuvieron en una misa de cuerpo presente en la calle Tierra y Libertad, de la colonia Poder Popular Francisco Villa, para despedirse de ella.
“Pedimos a las autoridades municipales, estatales e incluso al Presidente [Andrés Manuel López Obrador] que detengan a la persona que le hizo esto a mi hija, es lo único que pedimos, justicia”, clamó José Manuel, padre de la infante, quien sostuvo durante la ceremonia religiosa una fotografía de su hija.
La noche del 31 de diciembre pasado, aproximadamente a las 19:00 horas, la niña desapareció mientras jugaba en la calle, a unos cuantos metros de su casa.
“Estábamos juntos preparando todo para la cena, yo me metí a bañar y me dijo ‘papi, préstame tu encendedor para quemar mis ratoncitos’ y le dije que sí, ya después no la vimos y pensamos que estaba con su abuelita, porque siempre se iba para allá. Su hermano fue a buscarla y entonces nos dimos cuenta de que desapareció”, recordó el papá de Camila.
Los seres queridos y residentes de la colonia iniciaron su búsqueda por esa área durante la noche del 31 de diciembre y hasta la madrugada del 1 de enero. En un predio donde se construyeron tres viviendas precarias, con tabiques mal colocados y láminas de cartón, encontraron el cuerpo de la pequeña, durante las primeras horas del nuevo año.
Sospechan de vigilante. Ese terreno, que está enfrente de donde vive la familia de Camila, era ocupado por Marciano “N”, un vigilante de la colonia originario de Puebla, quien es señalado por los habitantes como el presunto responsable de su muerte.
El hombre que es acusado de abusar sexualmente de la niña y de asesinarla huyó del lugar.
La causa de su muerte fue por asfixia, confirmó la Fiscalía General de Justicia del Estado de México, que realiza la investigación para detener al probable homicida.
“Actualmente el personal de la Fiscalía Especializada en Feminicidios está integrando la carpeta de investigación correspondiente, para solicitar la orden de aprehensión respectiva en contra del o los probables partícipes de estos hechos.
“Los familiares de la niña han sido atendidos y cuentan con el apoyo y respaldo de la Comisión Ejecutiva de Atención a Víctimas, a través de asesoría sicológica y jurídica”, dijo la fiscalía en un comunicado.
El cuerpo de Camila fue sepultado por la tarde en el panteón municipal de Xico. El ayuntamiento vallechalquense informó que la búsqueda del presunto homicida continuará, pero la FGJEM es la encargada de llevar a cabo las indagatorias.