La fiscal capitalina, Ernestina Godoy Ramos, dijo que del 1 de enero al 10 de noviembre de 2020 han sido atendidos —en la Agencia 59 para menores de edad— un total de 909 niñas, niños y adolescentes agredidos por alguna persona cercana a su entorno.
De ese universo, 700 se han quedado bajo el resguardo del DIF capitalino, uno bajo el cobijo del DIF nacional, 25 en el Centro de Estancia Transitoria (CET) de la fiscalía y 70 han sido reunidos con sus familiares.
A través de un video, Godoy Ramos precisó que la Fiscalía General de Justicia (FGJ) prioriza la permanencia de los menores con sus familias de origen, o bien, que sean acogidos con otra, pero al mismo tiempo buscan evitar su ingreso al área lúdica de la Agencia 59.
Explicó que cuando un infante ingresa a la institución como víctima es canalizado con un médico, en donde se les realiza un examen físico. Luego el personal de trabajo social se encarga de acompañar a las niñas, niños y adolescentes al momento de realizar las entrevistas, asistidos de un asesor jurídico y sicólogos.
EL UNIVERSAL dio a conocer que diversas organizaciones civiles identificaron un patrón alarmante en los dictámenes periciales sicológicos que realiza la FGJ local, los cuales tienden a favorecer a los agresores, a pesar de que las víctimas menores de edad presentan rasgos de haber sido atacadas sexualmente.
Especialistas consultados encontraron que en los dictámenes periciales practicados por la fiscalía capitalina, los presuntos victimarios salen favorecidos, pues la institución arroja que ninguno tenía rasgos de ser agresor sexual. Argumento que, según contaron, toman los servidores públicos para no judicializar las carpetas de investigación y mandar los expedientes al archivo.
También aseguraron que los servicios periciales y la fiscalía para delitos sexuales están siendo ineficientes, y por ese hecho los casos no están avanzando, y más durante el periodo que lleva la capital por la pandemia del Covid-19.
Armando Barrera Cuevas, abogado de la organización Cauce Ciudadano, comentó que parece que en la FGJ hay un modus operandi, pues los dictámenes que ellos han analizado favorecen a los agresores, lo que hace pensar que “tienen precio”.
Cotidianamente se pierden niños
En el mismo mensaje, la fiscal de la Ciudad de México comentó que “cotidianamente” reciben reportes por la desaparición de niños en diferentes partes de la capital del país.
“Cotidianamente recibimos denuncias de padres y madres que no localizan a niños, niñas y adolescentes. Por fortuna, la gran mayoría de estos casos no ocurren en contextos delictivos. Casi 100% se tratan de ausencias voluntarias o están relacionados con problemas familiares”, expuso en su mensaje transmitido por redes sociales.
Sin embargo, informó que en lo que va del año se han localizado a 463 niñas, niños y adolescentes reportados como desaparecidos; ninguno de ellos fue víctima de un delito.
Comentó que del 2 al 10 de noviembre hallaron a 47 personas menores de edad, a quienes su padres buscaban.
Godoy Ramos precisó que cuando se detecta un contexto delictivo en una desaparición, el Ministerio Público y Policías de Investigación (PDI) intervienen para iniciar actos de indagatoria y búsqueda, dependiendo del contexto específico.